A André Heijl, la pasión por el sector hortofrutícola le viene de cuna. Durante años, su madre Rina se encargó de las actividades promocionales de marcas como Jaffa, Carmel Agrexco, Unifruco, Cape, Outspan y Florida Citrus, por lo que ya de pequeño le "arrastraban" a los mercados mayoristas de Leidschendam, Ámsterdam y Róterdam para entregar material promocional.
Tras una carrera en Sudáfrica y Oriente Medio, el profesional regresó a los Países Bajos, donde fundó junto a su esposa la firma Nulifar Anrin Logistics, especializada en el transporte y la manipulación de frutas y hortalizas. El nombre de la empresa hace referencia a los nombres de André y Nulifar y es a la vez una oda a su madre Rina.
"Gracias al trabajo de mi madre, que falleció hace cuatro años, conocí a mucha gente del sector: productores, importadores, mayoristas, compañías navieras, supermercados..., pero me interesaba aprender más acerca de los procesos de producción. Fue entonces cuando me fui a Sudáfrica, donde el antiguo director de Capespan me tomó bajo su tutela. Gracias a eso aprendí mucho, entre otras cosas, sobre el cultivo de la uva. Al final, acabé viviendo quince años en Sudáfrica, donde trabajé ocho años para Afrifresh y aprendí a darle salida a toda la gama de productos de la finca, vendiendo a todo tipo de destinos, desde mercados premium, como Japón o Reino Unido, hasta destinos europeos y Oriente Medio".
Cuando uno de sus clientes le pidió a André que fuera a Oriente Próximo, dio el salto a EAU. "Fue una época maravillosa. Recibíamos unos 2.500 contenedores de fruta al año, desde bananas de Ecuador hasta cítricos, uvas de varios continentes o limas de Taiwán. Me encargaba sobre todo de los procesos logísticos, y no tanto de las ventas. Por cierto, también resultó muy interesante desde el punto de vista comercial. Gracias a los volúmenes que manejábamos, pudimos llegar a tales acuerdos con las navieras que los descuentos que lográbamos para el flete de contenedores se convirtió en nuestra principal fuente de ingresos".
En EAU, André conoció a su mujer, que se dedicaba a realizar controles de calidad para empresas de fuera de Oriente Medio. "Cuando nos llegaba una reclamación, nos pedían un informe objetivo. En aquellos años, hicimos muchos informes de control de calidad para uvas, cítricos, frutos rojos, zanahorias, kakis, cebollas y mangos".
En algún momento, renació el deseo de regresar a la tierra natal. A André ya no le llamaba tanto negociar precios, pero no rechazó una oferta de Opticool. "Allí aprendí mucho sobre envíos y trámites aduaneros. Para mí, era una actividad bastante nueva, ya que siempre había subcontratado todos los servicios más técnicos del transporte de mercancías. Disfrutaba mucho; el trabajo era menos estresante que la venta diaria, y además, con ello le quitabas algo de carga al cliente".
André trabajó después para Agromerchants y Total Exotics, y luego llegó un proyecto en el que supervisó la transición a un nuevo paquete ERP integrado. Una vez completada esa integración, él y su mujer Nulifar decidieron asumir el reto de emprender por su cuenta, centrando sus operaciones en Bleiswijk. "Mi mujer se centra en los controles de calidad; somos los oídos y los ojos de los clientes rusos que compran en Europa para reexportar. Yo me ocupo de poner en orden el papeleo. Es una tarea que mucha gente evita y que produce auténticos quebraderos de cabeza, pero para mí se trata de un reto muy disfrutable". Y también se me da bien. De hecho, en los últimos años solo me ha pasado una vez que un camión se quede atascado en la frontera".
André y su mujer Nulifar.
"A menudo los vehículos llegan por la mañana. Nosotros nos ocupamos de todas las gestiones y, esa misma tarde, pueden ya ponerse en marcha a Rusia. Los clientes suelen dejarlo todo en nuestras manos, y si consigues sacarlo adelante, el trabajo resulta muy gratificante. Gracias a mi experiencia, puedo garantizar que los productos llegarán desde el productor al consumidor con una logística fiable. Siempre tenemos trabajo, pero de octubre a abril es cuando solemos estar más ocupados. Los meses de verano son relativamente tranquilos. También llevamos a cabo actividades secundarias. Por ejemplo, gestionamos el transporte y el despacho de aduanas para el proveedor hortícola holandés Royal Brinkman".
"Al principio, trabajábamos aún con Excel, pero llegó un momento en que tuvimos que buscar un paquete ERP adecuado. Eso es justo lo que me ofrecía Caswell, que ya conocía de antes. Aunque los desarrolladores ya se han jubilado, me apetecía volver a usarlo, porque el paquete hace exactamente lo que se supone que debe hacer. Gestionamos todas nuestras actividades, desde la administración de existencias hasta el despacho de aduanas y la administración financiera, con este sistema, así que estoy muy satisfecho. A partir del mes que viene, nuestro equipo se reforzará con otras dos personas", afirma André. Cuestionado acerca de sus planes para los próximos cinco años, responde que para entonces le gustaría disponer de su propio almacén e instalaciones. "Espero que para entonces podamos ya ofrecer el paquete completo de servicios a entre 10 y 15 clientes de Europa del Este, incluyendo aduanas, almacenamiento y transbordo, etiquetado, clasificación y enmallado. Básicamente, ofrecemos un servicio completo a nuestros clientes".
Para más información:
André Heijl
Anrin Logistics
Klappolder 191
2665 MP Bleiswijk (Países Bajos)
[email protected]
www.anrinlog.com