Las altas temperaturas registradas en las últimas semanas han incrementado la demanda de frutas refrescantes como el melón y la sandía. Sin embargo, quienes deseen consumir productos originarios de Castilla-La Mancha deberán esperar hasta mediados de julio, según José Ángel Serrano, presidente de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Melón de La Mancha.
La fecha exacta de inicio de la cosecha dependerá de las condiciones meteorológicas, aunque se estima que rondará el 20 de julio. Serrano advirtió que el granizo reciente ha afectado varias parcelas en municipios como Alcázar de San Juan, Tomelloso, Arenales de San Gregorio y Valdepeñas, con daños considerables en algunos cultivos. La evaluación del impacto se realizará más adelante.
Actualmente, la fruta que se encuentra en supermercados y fruterías proviene de Almería, y próximamente de Murcia. En un inicio, se temía que las lluvias en el sur coincidieran con la cosecha de Castilla-La Mancha, pero finalmente no será así.
Desde la IGP Melón de La Mancha se prevé un aumento en el consumo de estas frutas, impulsado por el calor extremo registrado en mayo y junio, con temperaturas cercanas a los 40 grados. Calor y consumo van de la mano, señalan desde la IGP
En cuanto al precio, actualmente el producto es escaso y su costo elevado. No obstante, se espera que con la llegada de más fruta al mercado, los precios disminuyan. Serrano afirmó que todavía es pronto para hacer pronósticos.
Fuente: latribunadeciudadreal.es