Recientemente, el precio de la pitahaya roja china cultivada bajo iluminación suplementaria ha caído drásticamente. El precio actual en el mercado es de solo alrededor de 3 ¥ (0,19 dólares) por kilogramo, en comparación con los 6 ¥ (0,38 dólares) por kilogramo habituales, lo que supone una caída de casi el 50%. Fuentes del sector atribuyen este descenso principalmente a la escasa demanda interna.
Longyisheng Dragon Fruit Base, que explota más de 53 hectáreas de plantaciones y produce aproximadamente 2 millones de kilogramos de pitahaya roja al año, se ha visto afectada por esta tendencia. El Sr. Dong, director de la empresa, explica: "Nuestra pitaya roja tiene un contenido de azúcar del 14-16%, un aspecto atractivo y un sabor excelente. Este lote de fruta se cultivó bajo luz artificial en marzo y salió al mercado a mediados de junio, unos 20 días antes que la fruta madurada de forma natural. La volatilidad actual de los precios afecta principalmente a este lote de fruta con iluminación artificial y tiene un impacto mínimo en la fruta de maduración natural que se cosechará a finales de este mes".
"Esta última no se recogerá hasta el 30 de junio y el rendimiento parece bueno", añade Dong. "Sin embargo, debido a la lenta recuperación de la temperatura y a la escasa luz solar en marzo y abril, el rendimiento y la calidad de la fruta cultivada con luz artificial son menores y menos estables esta temporada. Por el contrario, la fruta que madura de forma natural a finales de junio se ha beneficiado de unas mejores condiciones meteorológicas y presenta una calidad y un rendimiento superiores".
Dong también señala una expansión considerable del cultivo durante el último año, pero señala que el rendimiento general de la inversión ha sido decepcionante. Si bien las frutas cultivadas con iluminación artificial disfrutaban antes de una ventaja en cuanto al precio durante la temporada baja, especialmente en invierno y a principios de primavera, el aumento del coste de la iluminación y la creciente saturación del mercado han erosionado esa ventaja.
"Antes, las frutas cultivadas con iluminación artificial ofrecían sólidos beneficios durante la temporada baja, pero ya no es así", afirma. "Aunque aún se dan algunas ventajas en esa ventana, ahora todo el sector debe centrarse en mejorar la calidad y la consistencia de las frutas cultivadas con iluminación artificial".
De cara al futuro, el mercado se prepara para una nueva ronda de ajustes de la oferta y la demanda, ya que la pitahaya adurada de forma natural comenzará a inundar el mercado a finales de junio. Las expectativas del sector sugieren que el mayor rendimiento de la fruta natural podría ayudar a estabilizar la oferta y, si las condiciones meteorológicas favorables continúan, los precios podrían mantenerse estables.
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Sr. Dong
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