Los productores de aguacate en Kenia se preparan para dar inicio al segundo ciclo de producción del año, que está previsto que comience dentro de dos o tres semanas. Tras un arranque complicado, marcado por retos logísticos y una competencia feroz en los mercados clave, el sector logró cerrar su primera mitad de la temporada con señales alentadoras: un repunte en la demanda y una recuperación notable de los precios en comparación con la campaña anterior.
"Por ahora, la fruta presenta un contenido de materia seca de entre el 18% y el 19%", comenta Paul Kyalo, director general de Konza Tropicals. "Esta prolongación de la temporada, que prácticamente permite cosechar durante todo el año, ha sido posible gracias a la expansión del cultivo en la región del Valle del Rift".
"Tradicionalmente, la producción keniana se concentraba en dos zonas bien definidas: las zonas cafeteras, de clima cálido, donde la campaña se extiende de febrero a junio; y las zonas de té, más frescas, con una temporada que va de mayo a agosto. En los últimos años, el Valle del Rift ha emergido como una región clave, caracterizada por explotaciones a gran escala que permiten mantener la oferta activa desde mayo hasta marzo", explica Kyalo.
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Un comienzo lento
La primera mitad de la temporada se vio impactada por la crisis logística en el mar Rojo, que coincidió con una gran afluencia de fruta desde otros orígenes hacia Europa. "La demanda internacional durante el primer semestre de 2025 se vio afectada por demoras en el transporte marítimo, provocadas por la interrupción de rutas en el mar Rojo. Aunque varias navieras reanudaron sus operaciones en esa zona a lo largo del año, los tiempos de tránsito hacia Europa aún no se han estabilizado", detalla.
Esto, sumado a una sobresaturación del mercado europeo con aguacates de otras regiones, redujo la confianza de exportadores kenianos e importadores internacionales en mercados clave como Róterdam. "La campaña arrancó con fuerza en febrero, con una demanda sostenida hasta inicios de mayo. Sin embargo, a partir de la segunda quincena de ese mes, la situación cambió drásticamente debido al ingreso masivo de fruta de otros orígenes. Esta sobreoferta se prolongó hasta agosto, manteniendo los precios a la baja", continúa.
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"En agosto notamos un cambio de tendencia: numerosos importadores europeos han reactivado sus programas y buscan activamente aguacate keniano para cubrir la segunda mitad del año", señala Kyalo. "Además, mercados como los países del golfo Pérsico, Asia y Turquía han mostrado una demanda creciente, respaldada por un consumo al alza, una oferta constante y la consolidación del aguacate keniano como producto de calidad".
El mercado interno al rescate
A la reactivación internacional se suma un impulso firme desde el mercado interno, en especial gracias al crecimiento de la industria procesadora de aceite de aguacate. Actualmente, Kenia cuenta con más de 30 empresas dedicadas al procesamiento de aceite a escala comercial, y más del 80% de ellas se han establecido en apenas los últimos dos años.
Esto ha permitido que, en lo que va de 2025, más del 70% de la producción haya sido absorbida por el mercado interno, impulsado por la alta demanda global de aceite de aguacate. Esta tendencia ha generado una intensa competencia entre procesadores por asegurar el suministro de fruta madura.
A diferencia del mercado de exportación en fresco —donde la estética del fruto es determinante—, la industria aceitera prioriza la madurez interna, lo que ha permitido incorporar no solo la variedad Hass, sino también variedades de piel verde e incluso locales. "Esto ha dinamizado la demanda local y ha generado oportunidades para muchos agricultores que antes quedaban fuera del canal de exportación. El crecimiento acelerado de la industria nacional del aceite ha transformado completamente las reglas del juego en el mercado interno", manifiesta Kyalo.
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Expectativas positivas
El aumento simultáneo de la demanda externa e interna ha ejercido una presión alcista sobre los precios. "Desde abril de 2025, hemos observado un incremento constante de los precios frente al mismo período de 2024, impulsado principalmente por el auge del sector del aceite", señala Kyalo. En promedio, los precios en el mercado local han subido entre un 10% y un 20% respecto al año anterior.
"En la segunda mitad del año, los agricultores han llegado a recibir hasta 130 chelines kenianos (0,88 €) por kilo de fruta de calidad exportación, mientras que el aguacate destinado a la industria aceitera (de otras variedades o calibres) ha alcanzado en promedio los 50 chelines (0,34 €) por kilo. Estas cifras suponen una mejora considerable respecto a la campaña pasada, reflejo de la creciente competencia entre el canal fresco y el canal industrial", apunta.
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"El segundo ciclo de la temporada se perfila como uno de los más prometedores de los últimos años. La demanda internacional será claramente superior a la de 2024, mientras que la oferta será más limitada, especialmente tras las importantes pérdidas registradas en Marruecos por las olas de calor. Todo apunta a que los precios seguirán al alza, tanto en el mercado global como en el mercado interno keniano", concluye Kyalo.
Para más información:
Paul Kyalo
Konza Tropicals
Tel.: +254 711 214 869 (Kenia)
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