El mercado hortofrutícola mundial está en constante evolución, y los consumidores exigen productos de mayor calidad con una vida útil más larga y alternativas más sostenibles. A la vanguardia de la innovación tecnológica en maduración y almacenamiento frigorífico de frutas se encuentra Frigotec, una empresa con más de 30 años de experiencia en garantizar que la fruta llegue a los consumidores en condiciones óptimas. Roland Wirth, director general de la empresa, explica sus soluciones de vanguardia y su visión del futuro de la maduración y el almacenamiento de fruta.
© Softripe
Un legado de innovación
Fundada en 1991, Frigotec comenzó su andadura especializándose en la industria de la manzana y la banana, centrándose en la maduración y el almacenamiento en atmósfera controlada (AC). "Nuestra empresa lleva ahora ya más de 34 años activa", explica Roland. "Desde el principio, nos especializamos en el almacenamiento y conservación de larga duración mediante el uso de cámaras de atmósfera controlada, y también en el campo de la maduración de frutas. Al principio, trabajábamos sobre todo con manzanas y bananas, pero con el tiempo nos hemos ido diversificando con otras frutas y también algunas hortalizas".
Este enfoque en la innovación ha permitido a Frigotec ir mejorando y ampliando continuamente su oferta. En 2017, la empresa introdujo al mercado europeo una tecnología revolucionaria y patentada: Softripe®, un sistema de maduración dinámico que depende de la propia fruta, y que optimiza la calidad de una manera que resulta inviable en cámaras de maduración convencionales..
Tecnología que depende de la propia fruta
Softripe representa un avance notable en el ámbito de la tecnología de maduración. A diferencia de los sistemas clásicos, que aplican procesos de maduración fijos, Softripe se comunica con la propia fruta, ajustando de manera dinámica los niveles de temperatura, oxígeno, dióxido de carbono y etileno en función del estado fisiológico y la fase de maduración de esta.
Softripe se adapta a variaciones de la fruta de distintos países y estaciones. Mediante un análisis continuo de datos sobre la respiración y el estado fisiológico de cada lote, el sistema puede ajustar y afinar los parámetros de maduración. Según Roland, esto garantiza una calidad constante, independientemente del origen o de factores estacionales.
"Las frutas están vivas", subraya Roland. "Respiran, toman oxígeno y liberan CO₂. En una cámara de maduración presurizada y estanca podemos medir su respiración. Eso es lo que utilizamos para comunicarnos con las frutas y guiarlas a través de su proceso óptimo de maduración".
El etileno, la hormona vegetal natural que desencadena la maduración, desempeña un papel clave en el sistema. Tradicionalmente, el etileno se aplicaba en cantidades fijas, lo que a menudo provocaba estrés en la fruta y resultados desiguales. Las frutas podían madurar demasiado, o no hacerlo correctamente. Softripe, por el contrario, ajusta el nivel de etileno de forma dinámica, permitiendo que las frutas "le digan" al sistema cuándo y cuánto etileno necesitan. El resultado es un producto de alta calidad, con menos estrés para la fruta y pérdidas mínimas para productores, distribuidores y retailers.
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Como sabrá cualquier consumidor de productos hortofrutícolas, a menudo es muy difícil controlar el grado de madurez de los productos en casa. Las frutas, por ejemplo, suelen llegar o poco o demasiado maduras, sobre todo las que son difíciles de madurar de forma constante, como los aguacates, los mangos o los kiwis. Según Roland, Softripe garantiza que la fruta llegue siempre a los lineales en el punto perfecto de maduración, lo que permite ofrecer una experiencia siempre agradable a los compradores y reduce la probabilidad de desperdicio en el hogar. "Con Softripe podemos garantizar una maduración óptima de la fruta a nivel tanto ecológico como fisiológico. Esto garantiza que la fruta llegue al consumidor en condiciones óptimas, con la textura, el aroma y el sabor adecuados. La gente siempre se sorprende al ver lo estable y bueno que es su estado de conservación".
Recepción del mercado y alcance mundial
Softripe ya ha dejado su huella en Europa y fuera de ella, con instalaciones en Alemania, Países Bajos, Bélgica, Suecia, Dinamarca, Islandia, España y Suiza, así como en Brasil y Chile. "Nuestro sistema está ya funcionando en doce países", afirma Roland. "La respuesta de mayoristas, maduradores, cadenas de retail y productores ha sido abrumadoramente positiva. Son conscientes de las ventajas y cada vez son más los que quieren utilizar este sistema".
A pesar del éxito, Roland admite que aún hay mucho margen de crecimiento. "Todavía estamos en una fase temprana en términos de comercialización. Hay grandes mercados como Estados Unidos, China, India, Japón y Corea del Sur en los que tenemos que ofrecer información sobre el sistema. La tecnología está probada, pero hace falta que más gente sepa que existe y entienda sus ventajas".
Según Roland, Softripe beneficia a todos los eslabones de la cadena de suministro. La reducción de pérdidas, la mejora de la calidad y una mayor vida útil se traducen en ventajas tangibles tanto para los consumidores como para el retail y los productores. "Cuando los consumidores prueban la fruta, notan la diferencia. El reto ahora es lograr que esa fruta de alta calidad llegue a más clientes en todo el mundo", explica Roland.
Sostenibilidad y responsabilidad medioambiental
Además de mejorar la calidad de la fruta, Frigotec apuesta por soluciones sostenibles en sistemas de refrigeración y almacenamiento en frío. La empresa ha pasado de usar sistemas de refrigeración directa a adoptar sistemas indirectos que utilizan fluidos de agua-glicol, que permiten un control más preciso de la temperatura utilizando, además, agentes refrigerantes más respetuosos con el medio ambiente.
"Utilizamos sobre todo propano como refrigerante", explica Roland. "Es un material natural, con nula capacidad para dañar la capa de ozono y casi ningún potencial para acelerar el calentamiento global. El coste de las piezas y el servicio es como el de un sistema clásico de freón directo. Combinado con nuestro preciso control de la temperatura del fluido, los clientes consiguen una calidad de almacenamiento superior, al tiempo que se preparan para cumplir futuras normas medioambientales".
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Al optimizar el proceso de maduración y reducir las pérdidas de fruta en toda la cadena de suministro, Softripe también contribuye a reducir las emisiones de CO₂, dado que una menor generación de residuos implica también menos recursos utilizados en su producción, transporte y eliminación, lo que convierte al sistema en una solución verdaderamente sostenible. "Cuando las frutas se maduran de forma óptima, reducimos la generación de residuos en todas las fases, desde la llegada del producto a las instalaciones de maduración hasta su adquisición por parte del consumidor, pasando por todas las fases de distribución", añade Roland.
Según Roland, el sistema mejora la vida útil incluso de productos delicados como los mangos transportados en contenedores, elevando su calidad a un nivel comparable al de los productos transportados por vía aérea y contribuyendo a mantener su sabor y textura. Según Roland, se trata de un gran avance tanto para el retail como para los consumidores, que esperan siempre fruta de la más alta calidad, pero que también exigen sostenibilidad.
Tecnología avanzada y servicio de alta tecnología
La estrategia de Roland no se centra únicamente en la maduración. Sus sistemas de almacenamiento a largo plazo en atmósfera controlada también se benefician del control de datos. Monitorizando la respiración y ajustando los parámetros de almacenamiento, Frigotec puede ajustar los niveles de oxígeno al nivel más bajo posible para prolongar la vida útil. Además, se mantiene la calidad, se reducen las pérdidas y se prolonga la vida útil de los productos una vez que estos llegan a los lineales.
La empresa también está invirtiendo en infraestructura de servicios para sostener su creciente presencia mundial. Roland: "A corto plazo, vamos a abrir un centro de servicio mundial Softripe para ayudar a los clientes con el mantenimiento y la optimización del sistema, garantizando así que estos sistemas de alta tecnología logren de manera consistente buenos resultados en múltiples países".
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La IA y el futuro de la maduración de la fruta
En el corazón de la innovación de Frigotec está la inteligencia artificial, explica Roland. Softripe es un sistema de autoaprendizaje que optimiza automáticamente sus "recetas" de maduración para diferentes tipos de fruta basándose en datos obtenidos de las propias frutas y en los requisitos del cliente. La fruta manda, y cada cámara de maduración tiene su propio ADN", declara Roland con una sonrisa. "El sistema escucha a la fruta y se adapta en consecuencia".
De cara al futuro, Roland ve un futuro prometedor para la tecnología de maduración y almacenamiento de fruta, tanto en Europa como fuera de ella. La demanda de productos hortofrutícolas de alta calidad está en alza, y la sostenibilidad se está convirtiendo en un factor esencial para el sector. "Con Softripe podemos reducir significativamente las pérdidas, mejorar la sostenibilidad y garantizar que todos los consumidores reciban fruta en su punto, con un sabor delicioso y una vida útil más larga", defiende.
El reto, añade, es expandirse globalmente manteniendo la calidad del servicio. "Nuestro objetivo es llevar esta tecnología a más países, educar a los mercados y establecer un estándar de excelencia en la maduración de la fruta en todo el mundo".
Es real, práctico y funciona
Frigotec lleva más de tres décadas combinando una dilatada experiencia en almacenamiento y maduración en atmósfera controlada con tecnología de vanguardia para redefinir la calidad de los productos hortofrutícolas. Su sistema Softripe, que depende de la propia fruta y la inteligencia artificial, garantiza una maduración óptima, una mayor vida útil y menos pérdidas, al tiempo que promueve la sostenibilidad. Roland subraya: "No se trata de tecnología sofisticada por el hecho de serlo; se trata de algo real, práctico y útil. La fruta nos dice lo que necesita y nosotros nos aseguramos de que la tecnología le proporcione exactamente eso. Ese es el futuro de la maduración y la calidad de la fruta".
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