"Las empresas con visión de futuro y un crecimiento saludable no dudan de la idoneidad del CO₂ como refrigerante", afirma Matthias Cuvelie, director general de Airclima, una empresa belga especializada en refrigeración industrial. "Pasarse a la refrigeración o la ultracongelación con CO₂ es más que una decisión técnica. Es una inversión estratégica en sostenibilidad, calidad del producto y fiabilidad operativa. Quienes optan por el CO₂ no solo van un paso por delante en lo que respecta al medio ambiente, sino que también están sentando las bases para una actividad más eficiente, más ecológica y preparada para el futuro".
© AirclimaMatthias Cuvelie y Kiran Cluckers.
Según Airclima, el CO₂ ofrece mucho potencial como refrigerante. "En su transición de los refrigerantes sintéticos a los naturales, el sector hortofrutícola utiliza sobre todo amoníaco, propano y CO₂", añade Kiran Cluckers, director comercial de Airclima. "No percibimos el CO₂ como una moda pasajera, sino como una opción sostenible para el futuro. Se trata de un refrigerante flexible y versátil, adecuado para una amplia gama de aplicaciones. Pero no prescribimos opciones, nos limitamos a guiar a los clientes en su propio viaje".
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Almacenamiento más prolongado, mejor calidad
Refrigerar con CO₂ ofrece la gran ventaja de aumentar la capacidad de almacenamiento conservando la calidad, asegura Kiran. "Estos sistemas garantizan unas temperaturas y niveles de humedad estables, un factor crucial para el almacenamiento de productos hortofrutícolas. Podemos adaptarnos perfectamente al grado de humedad de los propios productos y esto tiene un impacto positivo directo en su calidad y vida útil", explica.
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Kiran señala que la refrigeración por CO₂ también permite una recuperación eficaz del calor. "Se puede utilizar el calor residual para limpiar una zona de producción o para la calefacción de oficinas. Como el sistema recupera el calor incluso a altas temperaturas, se puede utilizar para calefacción durante todo el año, sin necesidad de sistemas adicionales, como bombas de calor o calderas". La congelación con CO₂ es también ya una opción viable. "La tecnología ha avanzado tanto que, con un diseño adecuado, el CO₂ resulta idóneo tanto para almacenes frigoríficos y distribuidores pequeños como para otros más grandes", defiende.
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Rápido retorno de la inversión
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Matthias admite que la inversión inicial es algo mayor que la de los sistemas tradicionales de freón. "Puede suponer entre un 30 y un 35% más con sistemas más pequeños, y un 15% más para instalaciones más grandes, sin embargo, el mayor rendimiento y los menores costes operativos garantizan que la inversión no tarde en amortizarse". Además, tanto el gobierno belga como el holandés fomentan la refrigeración con CO₂ mediante subvenciones", señala.
10 años de garantía total
Airclima diseña cada sistema componente por componente. "Nos tomamos el tiempo necesario para asegurarnos de que todo funcione perfectamente. Por eso podemos ofrecer una garantía global de 10 años para nuestros sistemas. Es algo que no se puede hacer con prisa". El centro de I+D de la empresa es clave para ello.
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"Estamos siempre probando nuevos componentes y sistemas de control. Las innovaciones en tecnología del CO₂ se suceden con rapidez. Queremos estar seguros de que cada nueva idea sea fiable antes de ponerla en práctica con nuestros clientes. Cada instalación debe satisfacer las necesidades del comprador: ese es siempre el principal objetivo para nosotros", concluye Matthias.
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Kiran Cluckers
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Airclima
Tel.: +32 473 84 08 51
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www.airclima.be
