Tropifoods, empresa familiar de Costa rica dedicada desde 1990 a la exportación de raíces tropicales, especialmente yuca, participa en uno de los cambios más relevantes que ha vivido este sector en los últimos años. Tras la prohibición del uso de parafina —un derivado del petróleo— en alimentos dentro de la Unión Europea, el mercado se ha visto obligado a buscar alternativas seguras para mantener la calidad del producto durante su transporte.
Joshua Guerrero, gerente de operaciones y financiero de Tropifoods, explica que el sector de raíces y tubérculos, encabezado por Ceryt (Cámara de Exportadores de Raíces y Tubérculos) inició en 2021 un proceso de investigación y desarrollo junto con varias empresas costarricenses especializadas en soluciones de recubrimiento. "Empezamos hace cuatro años, de la mano con el cambio regulatorio. Hoy utilizamos una cera natural compuesta por ácidos grasos vegetales, debidamente registrada y aprobada bajo el reglamento 1333 de la Unión Europea", detalla.
© Tropifoods
La nueva cera sustituye completamente la parafina y cumple con las exigencias europeas en materia de seguridad alimentaria. "No somos los inventores del producto, pero sí parte del grupo de empresas que colaboró en su desarrollo. Es un esfuerzo conjunto del sector, que está marcando una nueva etapa para la yuca costarricense", señala Guerro.
El proceso de aplicación se mantiene casi idéntico al tradicional, lo que facilita la adaptación en las plantas de empaque. "La línea de producción continúa igual: lavado, secado y encerado. El recubrimiento se aplica en menos de un minuto y preserva la calidad del producto durante el transporte, que puede tardar entre 15 y 18 días hasta los principales puertos europeos", comenta. Tropifoods prevé realizar su primer envío con la nueva cera hacia Algeciras en las próximas semanas.
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En cuanto al aspecto económico, Guerrero reconoce que la sustitución de la parafina implica un incremento de costos. "La cera vegetal es más cara porque todavía no se produce a gran escala. Es un producto nuevo y con un desarrollo reciente, pero era necesario hacer la transición. En este momento, más allá del precio, lo que buscamos es garantizar el cumplimiento de las normativas y mantener el acceso al mercado europeo", explica.
Pese a ese aumento, el gerente considera que el impacto será asumido de forma gradual por el mercado. "El cliente final también tendrá que ajustarse a esta nueva realidad, ya que la entrada de yuca con parafina a puertos como Algeciras está totalmente prohibida. Es una transición obligatoria, pero que traerá beneficios a largo plazo para todos", añade.
El desarrollo de este recubrimiento vegetal no solo responde a una necesidad regulatoria, sino que también marca un avance para un sector que llevaba años sin cambios significativos en sus procesos poscosecha. "Es una innovación que moderniza la industria y refuerza la imagen de la yuca costarricense en los mercados internacionales", concluye Guerrero.
Para más información:
Joshua Guerrero
Tropifoods
Costa Rica
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