La administración estadounidense anunció planes para reducir los impuestos a la importación de bananas y otras frutas como parte de los nuevos acuerdos comerciales con Argentina, Guatemala, El Salvador y Ecuador. El marco mantiene un arancel recíproco del 10% sobre los productos procedentes de Guatemala, Argentina y El Salvador, y un arancel del 15% sobre las importaciones ecuatorianas, pero prevé exenciones para los productos que no se produzcan en Estados Unidos en volúmenes suficientes.
Altos funcionarios señalaron que el banano y el cacao son algunos de los productos que probablemente queden excluidos de los aranceles en virtud de los nuevos acuerdos. Guatemala y Ecuador siguen siendo los mayores proveedores de bananos al mercado estadounidense.
Los anuncios se producen mientras el presidente Donald Trump se enfrenta a preguntas sobre las condiciones económicas y la asequibilidad. Las recientes elecciones llevaron a la administración a poner mayor énfasis en las preocupaciones sobre los precios. El secretario del Tesoro, Scott Bessent, dijo que la reducción de los aranceles de la fruta tiene como objetivo aliviar las presiones de costos, al tiempo que reconoció que los problemas relacionados con el clima también están afectando los niveles de precios mundiales.
Los funcionarios señalaron que las reducciones de precios dependerán de si los mayoristas y minoristas repercuten los ahorros arancelarios en los consumidores.
Se espera que los acuerdos comerciales con los cuatro países latinoamericanos se firmen en un plazo de dos semanas. Se producen después de que Trump anunciara en abril la imposición de nuevos aranceles a varios países. Muchas de esas acciones arancelarias se retrasaron después de las preocupaciones financieras mundiales, pero las nuevas tarifas se introdujeron en agosto para los países que la administración describió como "peores infractores".
En las últimas semanas, Estados Unidos también ha alcanzado acuerdos comerciales con la Unión Europea, Corea del Sur, Japón, Camboya, Tailandia y Malasia.
La Administración dijo que la reducción de los aranceles sobre el banano y otras frutas podría ayudar a los importadores y retailers estadounidenses, aunque la magnitud del impacto dependerá de la disponibilidad estacional, las condiciones de suministro mundial y la respuesta de los compradores dentro de la cadena de suministro.
Fuente: BBC