La cosecha de cítricos 2024/25 de la Cooperativa Morgia se presenta como una de las más atípicas de los últimos años. "La sequía y el calor del verano han influido de manera decisiva en el calibre de los frutos, especialmente en las clementinas tempranas", explica el director gerente de esta cooperativa italiana, Francesco Graziani. "El producto, de hecho, entró en la temporada con un calibre pequeño. Luego las lluvias de otoño ayudaron y el calibre aumentó. Ahora se dispone de los tamaños adecuados para las clementinas Comune".
A pesar de las dificultades de índole meteorológica, la calidad organoléptica es sorprendente. "Este año, las clementinas, pero también el resto de cítricos, son excepcionales para el consumo", confirma el responsable de calidad de la cooperativa, Giorgio Tricarico. "El sabor es realmente extraordinario, un punto fuerte reconocido por todos nuestros clientes".
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Francesco Graziani y Giorgio Tricarico.
La Cooperativa Morgia, fundada en octubre de 2011, es una empresa agrícola con sede en Corigliano-Rossano (CS) que cultiva, cosecha y comercializa cítricos, frutas de hueso y otras frutas, con pleno respeto por el medio ambiente y con el objetivo de alcanzar estándares de calidad cada vez más elevados, a fin de garantizar a los clientes productos recién recolectados, frescos y genuinos. La cooperativa trabaja los doce meses del año: cítricos (clementinas, mandarinas, naranjas, limones) y frutas de hueso (melocotones, nectarinas). Se trata de una organización diversa, caracterizada por un equipo cualificado y comprometido. Hasta la fecha, comercializa sus productos a través de la gran distribución en Italia y en el extranjero, con una capacidad de producción de aproximadamente 12.000 toneladas, de las cuales 8.000 de cítricos y 4.000 de frutas de hueso.
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Además de en Italia, la cooperativa opera en varios países —Alemania, Rumanía, Países Bajos, Europa del Este y países nórdicos— a través de cadenas establecidas y socios comerciales. "Cada mercado tiene necesidades diferentes en cuanto a calibre, embalaje o requisitos específicos. Algunos quieren malla; otros, el producto a granel; otros, el envase de 500 gramos. Nos adaptamos a todo, es parte de nuestro trabajo", explica Graziani.
Todos tienen el mismo valor
La cooperativa Morgia tiene socios pequeños, medianos y grandes, todos "compartiendo el mismo nivel de control", como señala Graziani. "Uno vale uno. Todos nuestros socios, independientemente de las hectáreas gestionadas, tienen el mismo valor. Todos siguen el mismo pliego de condiciones, y nuestros agrónomos controlan constantemente la producción. Los lotes son homogéneos, con algunas diferencias naturales de tamaño, pero la calidad es estable y está bajo control".
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Precios demasiado bajos: "No es devaluando el producto como aumentamos el consumo"
En el plano comercial, Graziani profundiza en una de las cuestiones más críticas de la campaña: la gestión de los precios. "Estamos sufriendo mucho en este momento, y no por causas externas, sino por un problema que nos viene de los operadores del territorio: hay demasiado individualismo".
Según el director gerente de la cooperativa, el mecanismo es siempre el mismo: "Competimos para ver quién ofrece más, o mejor dicho, quién puede bajar más el precio. Pero así no se consigue nada, al contrario, se devalúa el producto". Según él, la idea de que un precio más bajo puede estimular la demanda no se refleja en la realidad: "Está científicamente demostrado que cambiar el precio no aumenta el consumo. Si vendes diez palés, seguirás vendiendo diez. No es bajando el valor como se venden veinte".
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Graziani insiste en que la diferencia de unos céntimos no afecta al consumidor final. "Al cliente no le cambia la vida pagar 1 o 1,10 euros por un kilo de clementinas. Pero esos diez céntimos, para nosotros que procesamos miles de quintales, se convierten en cientos de miles de euros. Es dinero que necesitamos para planificar, invertir y avanzar".
La cuestión económica se une, además, a las dificultades climáticas, que amplifican el problema. "Ya tenemos que hacer frente a una temporada cada vez más complicada en términos meteorológicos. Si además nos quitamos la posibilidad de cobrar esos céntimos que marcan la diferencia, entonces el daño se hace irreparable".
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Destrío al alza: "La fruta es excelente, pero la gran distribución quiere perfección estética"
El verdadero problema crítico de la temporada, sobre todo para las variedades tempranas de clementinas, no ha sido la calidad interna, sino la piel. "La araña roja está provocando mucho destrío porque, al no poder intervenir con ciertos tratamientos previstos por el reglamento italiano, quedan defectos estéticos en la fruta", explica Tricarico. "La pulpa es excelente, pero la gran distribución quiere un producto perfecto también por fuera. Así que se descartan productos óptimos, con las consiguientes dificultades para productores y estructuras".
Es un tema frecuente en las comparaciones con países extranjeros. "En Italia, el tema de la piel verde está superado, mientras que en algunos países europeos sigue siendo una limitación, pues el consumidor no acepta lo que para nosotros es perfectamente normal, es decir, clementinas con el grado Brix correcto y niveles de acidez adecuados, listas para comer, pero con una coloración que todavía no es completamente uniforme".
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La rigidez de la normativa italiana, más restrictiva que la de otros países, limita también la utilización de determinados tratamientos fitosanitarios, lo cual, según Graziani y Tricarico, conduce a una paradoja: "La fruta es espectacular, pero si tiene defectos en la piel debido a que no podemos utilizar determinados tratamientos, se descarta. Y el destrío aumenta cada año".
En el frente europeo, las cadenas de la gran distribución van en la misma dirección: "Están endureciendo la normativa casi a niveles italianos. Exigen certificaciones, controles, normas y límites de residuos cada vez más restrictivos. Todo el mundo va por ese camino". No son exigencias que puedan cumplirse de la noche a la mañana, sino de procesos largos. "No es algo que se pueda inventar de un día para otro; es necesaria una planificación a largo plazo, de al menos tres años, para seguir siendo competitivos y satisfacer las demandas de Italia y del extranjero".
Graziani destaca también un punto crítico en las relaciones comerciales: "A menudo, la gran distribución solo se fija en las listas de precios, no en la fiabilidad de la estructura. Sin embargo, hay un año de trabajo detrás: certificaciones, análisis, pedidos cumplidos, camiones puntuales y entregas constantes. A menudo, todo esto pasa a un segundo plano". Un contexto que obliga a la cooperativa a invertir en tecnología, calidad y organización para poder responder a una demanda cada vez mayor.
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Nuevas instalaciones: tecnología, sostenibilidad e inteligencia artificial
Uno de los pasos más importantes en 2025 para Cooperativa Morgia es la inminente apertura de las nuevas instalaciones. "Estamos muy cerca", explican Graziani y Tricarico. "La nueva planta estará equipada con la última tecnología de Sorma Group: selección de calidad interna y externa, calibrado por peso, diámetro y color, y sistemas asistidos por inteligencia artificial.
También contará con: certificación CAM (Criterios Ambientales Mínimos); reciclado total del agua de procesamiento; 500 kW fotovoltaicos en autoconsumo, con otros 500 kW en acumulación programada en ampliación; una línea con dos clasificadoras electrónicas de seis canales cada una. La capacidad operativa alcanzará al menos 250 palés al día.
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Las instalaciones, totalmente climatizadas para garantizar unas condiciones de trabajo óptimas y preservar la frescura del producto, reflejan la profunda atención que la empresa presta a las personas. De hecho, habrá zonas dedicadas al bienestar de todos los empleados, incluidos los conductores externos, que dispondrán de un área de refrigerio y duchas. Para el personal interno, se construirán nuevos vestuarios y una cantina, lo que confirma que el valor humano está en el centro del crecimiento de la empresa.
"Invertir era obligatorio", concluye Graziani, "porque hoy la competitividad se juega en la tecnología, la reducción del consumo, la sostenibilidad y la capacidad de ofrecer unos estándares de calidad perfectos. No podemos permitirnos quedarnos atrás".
Para más información:
Morgia Soc. Coop. Agr.
Zona Industrial de Corigliano, snc
87064 Corigliano-Rossano (CS)
+39 0983 851260
[email protected]
www.morgiacooperativa.it
