Álvaro Quito, responsable de certificaciones, operaciones y logística de la Asociación Nueva Esperanza de Ecuador, detalla que el sector bananero enfrenta actualmente un escenario de alta demanda de certificaciones, retos fitosanitarios y variaciones importantes en los precios, tanto para el banano convencional como para el orgánico.
La asociación agrupa a 32 productores y complementa su oferta con fruta proveniente de seis plantaciones adicionales, alcanzando un volumen de 35 contenedores semanales destinados principalmente a mercados abastecidos por multinacionales como Chiquita, Del Monte y Fyffes.
Europa continúa elevando los requisitos sociales, ambientales y de control de procesos. "Trabajamos con certificaciones como Fairtrade International, Fairtrade USA, GlobalGAP y orgánico, y ahora se suman nuevas auditorías como SMETA. Cada estándar implica protocolos específicos, auditorías y registros permanentes. Esta carga administrativa incrementa los costos y tiempos de los productores, lo que, en momentos de precios altos del banano convencional, provoca que algunos opten por dejar temporalmente la producción orgánica", explica Quito.
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Quito señala que, aunque el Fusarium raza 4 no ha sido declarado oficialmente en el país, "existen rumores en el sector", lo que ha impulsado a los productores a reforzar medidas preventivas. Entre ellas, se aplican pediluvios, rodaluvios, cambio de botas y equipos de protección, junto con capacitaciones permanentes sobre Ralstonia (moko) y otras enfermedades.
Agrocalidad mantiene inspecciones constantes en centros de acopio, revisando calidad y aspectos fitosanitarios como presencia de cochinilla o daño en la fruta.
La operación logística también ha enfrentado incrementos notables en las últimas semanas. El alza en el precio del diésel, sumado a ajustes en tarifas de transporte y costos portuarios, está aumentando el valor final por contenedor. "Las navieras ya enviaron facturas con sobrecargos; hablamos de incrementos de alrededor de 5 dólares por contenedor", comenta.
"El mercado ha mostrado una fuerte volatilidad durante el cruce a 2025. El precio del banano convencional ha alcanzado los 12 dólares, impulsado, por la elevada demanda de Rusia. Este diferencial ha llevado a productores orgánicos a cambiar temporalmente al sistema convencional, que exige menos certificaciones y simplifica el empaque, reduciendo tiempos y costos", según Quito.
En contraste, el precio del banano orgánico permanece estable bajo contratos con multinacionales, cubriendo los costos de producción pero sin igualar el atractivo del convencional en semanas de alta demanda.
"Si bien el sistema Fairtrade permite ejecutar planes de desarrollo y apoyo social mediante el premio, los productores perciben que el aumento de las exigencias no siempre va acompañado de mejores ingresos. Por ello, la toma de decisiones entre orgánico y convencional se ha vuelto cada vez más dinámica y dependiente del comportamiento semanal del mercado", concluye.
Para más información:
Álvaro Quito
Asociación Nueva Esperanza
Ecuador
Tel.: +593 98 113 7842
https://asonuevaesperanza.com/
