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Glenn Bainathsah:

“El ‘software’ del sector de los productos agrícolas frescos está anticuado”

“Me encanta esto”, comenta Glenn Bainathsah, director comercial de Axians, al entrar en las instalaciones de Verhoeckx en Zn. Su traje hecho a medida contrasta fuertemente con la indumentaria de Paul Verhoeckx y Brigitte Smits, que trabajan entre champiñones. El vínculo que existe entre ellos es el “software” que utiliza la compañía, del que Axians se encarga desde hace un tiempo.

“Tenemos un nuevo sistema de ERP llamado NAV”, explica Smits, “porque el que usábamos antes está muy anticuado”. Actualmente, la empresa trabaja con una nueva versión de este “software”. “Las empresas del sector de los productos agrícolas frescos suelen trabajar con programas muy antiguos”, afirma Bainathsah. “Ahora mismo tenemos cuatro empresas a las que estamos sustituyéndoles el ‘software’ por uno nuevo”.



Pasar a limpio e imprimir
A pesar de que una empresa informática se horrorizaría al ver lo antiguos que son algunos de los programas que se usan, Bainathsah no tiene tantas objeciones. “Hay que respetar a las empresas que usan programas antiguos”, opina. “Sus sistemas funcionan”. Otro de los factores que les impulsa a no cambiar de programas es una razón de fondo: cuando esas empresas compraron sus paquetes de “software” hace años, estos no cumplían los requisitos del sector. “Por lo tanto, hay mucho trabajo personalizado invertido en ellos y, por eso, es difícil aplicar funcionalidades nuevas”.

Para empezar, utilizar un sistema nuevo implica una mayor digitalización. Bainathsah ofrece dos ejemplos: En algunas empresas, los empleados tienen que anotar algo cuando están de pie en las cámaras, para más tarde pasarlo a máquina. Con el nuevo “software”, que también funciona en teléfonos inteligentes y tabletas, ya no tiene por qué ser así. Además, muchas empresas imprimen sus facturas y las vuelven a escanear para enviarlas por correo electrónico porque su “software” no puede crear archivos PDF, algo que el nuevo sí. “Solamente esa ventaja ya es un motivo excelente para muchas empresas, pero hay muchas otras funcionalidades, como, por ejemplo, generar informes con del propio programa”, añade Bainathsah.

Evolución digital
En muchas empresas del sector, la media de edad de los miembros de la junta directiva es de 50 años, lo que a veces puede restringir el progreso. “Cambiar suele suponerles un gran esfuerzo, así que tienen que hacerlo por etapas: más que una revolución, es una evolución”, continúa Bainathsah. “Aprenden a utilizar las nuevas funciones del sistema poco a poco, lo que se nota cuando contratan empleados más jóvenes”. Por eso, está convencido de que cada empresa debería contar con alguien de la “generación digital” en su cúpula directiva. “Son quienes impulsan el cambio”.

Axians lleva años trabajando con el sector de los productos agrícolas frescos, pero crear visibilidad en este sector es algo relativamente nuevo para la empresa. “Trataremos de centrarnos mucho más en eso durante los próximos años”, comparte Bainathsah. “Nuestro último cliente se dio cuenta de que somos muy discretos en internet. Tal vez eso nos honre, pero hoy en día es vital tener mucha publicidad en la red y tenemos que hacer que sea más fácil encontrarnos por internet. Para Axians, los productos agrícolas frescos son estratégicos”.

“Me encanta la mentalidad de las empresas de este sector, en el que los acuerdos son auténticos contratos, y no solamente se aseguran de que cumplamos nuestra palabra, sino que también cumplen la suya”, asegura Bainathsah, que también percibe que es importante conocer el lenguaje del sector. “Las empresas más grandes tienen un administrador informático, pero las pequeñas, no. En esos casos, tenemos que ofrecerles mucha más ayuda y hacer las veces de gestor de proyectos para mantenerlo todo lo más sencillo posible”.

Además de la sorpresa que supone conocer su antigüedad, cree que el “software” de administración de relaciones con los clientes (CRM por sus siglas en inglés) también presenta desafíos. “Los comerciantes saben muchas cosas sobre sus clientes, pero no disponen de una perspectiva integral de todos ellos”, percibe Bainathsah. “Cuando comenzamos a hablar sobre ese tema, las empresas suelen responder: ‘¿pero es que no lo sabemos todo ya sobre nuestros clientes?’. No obstante, Bainathsah opina que es importante introducir esa información en un sistema. “Los datos personales, como las fechas de los cumpleaños, las facturas que no se han pagado, las quejas…”, enumera Bainathsah.

“Es importante estar informado, también en el mundo de las frutas y las hortalizas. Mantener el contacto personal con los proveedores y compradores es crucial, y crecer como empresa también implica que las relaciones, tanto nacionales como internacionales, se multipliquen, por lo que es inteligente tener esos datos guardados y centralizados, ya que no siempre se pueden tener todos esos conocimientos a mano. Cuando las empresas pequeñas se convierten en empresas grandes, es todo un arte mantener ese toque personal”, concluye.

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Axians
Glenn Bainathsah
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