Las batatas ya no son un alimento básico sólo en el sur de los Estados Unidos, ahora son un plato popular en las mesas de toda la nación. De hecho, los expertos agrícolas esperan que más productores de cultivos especializados consideren plantar el tubérculo en el medio oeste, para ofrecer más variedad de productos en los mercados de agricultores o mayoristas. A los consumidores cada vez les gustan más, ya sean fritas, al horno, hervidas, etc.
El consumo de batata estadounidense aumentó casi un 42 por ciento entre 2000 y 2016, alcanzando 3,2 kg por persona. Las autoridades del USDA dijeron que esto podría deberse a la promoción de los beneficios para la salud del tubérculo, pues son altos en beta caroteno y una fuente de potasio, fibra y vitaminas A y C.
Los principales estados productores (en 2017) fueron Carolina del Norte con 36.000 hectáreas, seguido de Mississippi, 11.700 hectáreas; California, 8.500 hectáreas; y Louisiana, 3.800 hectáreas. Los Estados Unidos en 2017 cosecharon 63.2500 hectáreas, para una cosecha de 732 millones de dólares, en comparación con 2007, con 40.000 hectáreas y un valor de 97 millones de dólares. En 2016, el precio promedio agrícola de la temporada de los Estados Unidos para las batatas fue de 22,40 dólares cada 45 kg.