Recientemente, Jim Bair, CEO de la Asociación de Manzanas de EE. UU., publicó un artículo educativo sobre manzanas en LinkedIn. En él, cuenta cómo las tecnologías de almacenamiento están haciendo posible la disponibilidad de manzanas durante todo el año. Por los comentarios, se desprende que esta publicación fue reveladora para muchos de sus seguidores. "Nos ha sorprendido la atención que ha despertado la publicación de Jim Bair", dice Mike Preacher, de Domex Superfresh Growers, quien aparece en la foto de la publicación en LinkedIn. "Teniéndola tan cerca, olvidamos la increíble tecnología que nos permite ofrecer manzanas crujientes y sabrosas todo el año", señala. "Mucha gente inteligente comenzó a trabajar en esto hace muchas décadas, y continuamos mejorando ese trabajo. Cuando era niño, no comíamos manzanas después de enero", indica.
Mike Preacher captado en un momento de reflexión, pensando en todas las manos que intervinieron en la producción de esas manzanas. Foto de Brena Mengarelli.
Disponibilidad durante todo el año
La cosecha de manzanas de Washington suele empezar en verano. "Comenzamos con las manzanas Gala a finales de julio y terminamos con Pink Lady® en noviembre", detalla Preacher. En total, la empresa lleva al mercado más de 30 variedades, entre ecológicas y convencionales. Alrededor del 30 por ciento del volumen total de producción se vende poco después de la cosecha y se almacena en cámaras frigoríficas convencionales. La gran mayoría, el 70 por ciento del total de la producción, se guarda en cámaras de atmósfera controlada (AC), que permite que estas manzanas se conserven hasta 12 meses. "La tecnología de atmósfera controlada nos permite tener oferta nacional los 365 días del año", dice Preacher.
Durante el proceso de AC, las manzanas están dormidas. La temperatura se reduce a un nivel justo por encima del punto de congelación, se elimina el oxígeno y se reemplaza por nitrógeno, el elemento más abundante en la atmósfera terrestre. "Durante este proceso, no hay suficiente oxígeno atmosférico para la degradación biológica normal ni suficiente oxígeno para que se manifiesten trastornos fisiológicos. Como resultado, las manzanas permanecen en excelentes condiciones". Una vez que se abren las puertas selladas, las manzanas se despiertan y están listas para ser lavadas, envasadas y enviadas como si las acabaran de cosechar. A lo largo del año, se abren las cámaras de atmósfera controlada para tener un suministro constante de manzanas frescas, coincidiendo con el flujo de ventas de Superfresh Growers.
La energía es un factor importante
La empresa tiene aproximadamente 500 cámaras de almacenamiento de atmósfera controlada, y cada una alberga hasta 1 millón de kilos de manzanas. Con el contenido de una cámara se llenan 54 tráileres frigoríficos. Se necesita mucha energía para mantener las cámaras de AC a estas temperaturas frías durante todo el año. "La energía, definitivamente, es un factor importante, e invertimos en paneles solares para maximizar la eficiencia energética de los 300 días de sol que tenemos anualmente en el este y centro de Washington y Oregón". Además, la empresa invierte en tecnología y sensores para monitorizar la salud de las manzanas mientras duermen. "Una vez que las puertas están cerradas, no podemos entrar a verificarlas, por lo que confiamos en la tecnología para mantenernos al día sobre su estado", explica Preacher. Se utiliza nitrógeno para manipular la atmósfera y expulsar el oxígeno. "Estamos invirtiendo en generadores de nitrógeno ecológicos". Por último, pero no menos importante, el éxito de la tecnología reside en un equipo capacitado y atento que entiende cómo ejecutar correctamente los procedimientos, así como reintroducir las manzanas dormidas en condiciones atmosféricas normales. "Hay que despertarlas lentamente para no crear problemas que las sorprendan y causen que respiren demasiado rápido".
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Catherine Gipe-Stewart
Superfresh Growers
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