La problemática situación hídrica en el sur de España ha tenido un fuerte impacto en el cultivo de la patata temprana durante los últimos años. Según las primeras previsiones, este año se espera una ligera reducción de la superficie cultivada en comparación con el año anterior. Sin embargo, la siembra se ha llevado a cabo en general bajo buenas condiciones. A principios de diciembre, llovió lo suficiente como para poder realizar el laboreo del suelo adecuadamente y se plantó una gran parte de los campos. Entre el 8 y el 10 de febrero, se registraron precipitaciones abundantes, que en algunos casos provocaron inundaciones en los campos y retrasaron la siembra restante. Posteriormente, se sucedieron lluvias escasas pero valiosas. Las fuertes lluvias y rachas de viento durante la Semana Santa, seguidas de una subida de la temperatura hasta los 25-30 ºC, provocaron un aumento de la presión de enfermedades en muchas áreas", nos informa Georg Kolmhofer, exportador de patatas tempranas con sede en Sevilla, a petición nuestra.
Georg Kolmhofer en el evento de patatas de este año en Berlín. El austriaco vive y trabaja en Sevilla, en el sur de España, 20 años ya. De las iniciales 35.000 hectáreas, la superficie de cultivo de patata en Andalucía se ha reducido ahora a una mínima parte de esa cantidad.
Se espera un aumento de la demanda en junio
Probablemente, la exportación de patatas tempranas a Alemania este año comenzará relativamente temprano. Ya a finales de abril podrían ponerse en marcha pequeños programas. A partir de la semana 20, se espera que el grueso de la cosecha esté disponible para su distribución. En general, según Kolmhofer, los volúmenes serán más bien moderados. "Muchos cultivos están dañados, hay también presión de enfermedades y los rendimientos son en parte muy modestos. En principio, los años con primaveras lluviosas no son años de alta producción de cosecha temprana".
Vista del cultivo de patata temprana en el sur de España.
Concretamente en Francia, dado que el mercado está vacío, hay una alta demanda de variedades de cocción firmes. Tal y como está la situación, se esperan nuevamente precios altos, ligeramente por encima del nivel del año pasado. Las continuas lluvias también han retrasado las fechas de plantación en las regiones tempranas de Alemania, por lo que la mayor parte de la cosecha se recolectará más tarde. "Por lo tanto, esperamos un vacío en la oferta de patatas hasta mediados o finales de junio, y un aumento en la demanda de patatas tempranas", señala Kolmhofer.
Patatas tempranas andaluzas de la variedad Annabelle.
El mercado alemán pierde importancia
El mercado de ventas alemán ha perdido importancia en los últimos años, continúa Kolmhofer. "En general, observamos que las patatas tempranas españolas ya no se perciben como un producto de gran volumen, sino más bien como un artículo para programas premium. Esto se debe, por un lado, a la problemática del agua, pero también a la falta de voluntad de los compradores de la gran distribución de incluir patatas tempranas del sur de Europa en sus programas. Será interesante observar si esta tendencia se consolida aún más".
Imágenes: Sesur
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Georg Kolmhofer
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