David y Andrew Moon, agricultores australianos de quinta generación, han desarrollado un nuevo modelo de producción de ajo mediante la transformación del ajo no vendido en ajo australiano puro en polvo.
Los hermanos Moon, afincados en St. George (Queensland), operan con la marca Moonrocks y suministran ajo fresco a los principales supermercados, entre ellos Coles. La explotación, situada a unos 500 km al suroeste de Brisbane, produce grandes volúmenes de ajo cada año. Sin embargo, las estrictas normas de clasificación de los supermercados hacen que con frecuencia se descarten partes de la cosecha debido al tamaño o la forma irregular de los bulbos.
"Sabíamos que el ajo que se desperdiciaba era un ajo perfecto, así que nos pusimos a pensar para ver qué podemos hacer con él", explica David Moon, que describe el ajo como "una planta perezosa", que requiere una recolección manual y un trabajo intensivo.
Los hermanos descubrieron la oportunidad de producir ajo en polvo a nivel local, teniendo en cuenta que China suministra la mayor parte del ajo en polvo que se consume en Australia. "Nos dimos cuenta de que no había un polvo de ajo puro australiano realmente bueno. China produce más ajo que el resto del mundo junto, y la mayor parte del ajo en polvo de Australia procede de China. Queríamos cambiar esta situación", explica Moon.
Tras tres años de pruebas y perfeccionamiento del proceso, los hermanos lanzaron G'day Garlic, elaborado íntegramente con ajo cultivado en Australia, sin aditivos. El producto se procesa in situ en una cocina sellada de alta higiene y actualmente se vende en línea en formatos de ajo granulado grueso, fino y en polvo sazonado, y está prevista su expansión a los supermercados.
La producción comercial de ajo sigue siendo una actividad intensiva en mano de obra, que se cubre con trabajadores temporeros de Timor Oriental y Vanuatu. El proceso implica un ciclo de nueve meses desde la siembra hasta la venta, lo que plantea problemas de liquidez a los productores. "Hay un intervalo de nueve meses entre la plantación y el cobro", explica Moon. "Es una enorme sangría para el flujo de caja, y ahí es donde entra Westpac".
Los hermanos están estudiando ahora el desarrollo de nuevos productos, como ajo machacado y encurtido, como parte de su plan general para añadir valor al ajo cultivado en Australia y reducir los residuos de los rechazos en el mercado fresco.
Fuente: The Advertiser