Se está produciendo una redistribución del uso de patatas a nivel mundial entre las categorías frescas y procesadas. El comercio de productos congelados lleva creciendo desde 2019, mientras que muchas regiones informan de estancamiento o ligeras caídas en el consumo per cápita de productos frescos. En 2023, la producción de patatas de la UE se situó más de un tercio por debajo de los niveles de 2000 como consecuencia de cambios en la superficie cultivada, la variabilidad estacional y la demanda para procesamiento. En Estados Unidos, la disponibilidad total por persona se ha reducido en unos 9 kilos respecto a principios de la década de 2000, con una participación creciente de los formatos procesados. En los mercados emergentes, el crecimiento demográfico y la urbanización están impulsando la demanda de procesados en distintos canales de distribución.
La inversión en procesados sigue influyendo en la superficie cultivada. En la UE-4, las expectativas de cosechas de récord para 2025 están ligadas a la ampliación de la capacidad de producción de patatas fritas y a la demanda contractual, y ha resurgido el riesgo de excesos de oferta y uso de excedentes para la producción de piensos o biogás. Entre 2019 y 2024, el valor de las exportaciones mundiales de patatas fritas congeladas ha aumentado, y nuevos proveedores están accediendo a los mercados asiáticos a medida que aumenta la demanda. El consumo en fresco está perdiendo terreno frente a los productos procesados, refrigerados, deshidratados o prefritos.
En el retail, el mayor crecimiento en el mercado de productos frescos corresponde a las líneas de patatas pequeñas y baby, que ofrecen uniformidad y tiempos de cocción cortos. Los formatos en envases aptos para microondas y para que las patatas puedan prepararse al vapor dentro de la bolsa son ideales para hogares más pequeños y en los que interesa una preparación más rápida de las comidas. Selecciones mixtas se combinan a menudo con sencillas propuestas culinarias, permitiendo ampliar la oferta de productos frescos incluso cuando caen los volúmenes de productos distribuidos a granel.
La competencia del arroz, la pasta y las recetas bajas en carbohidratos está afectando a la categoría, aunque el método de preparación sigue siendo un factor clave de la percepción nutricional. El retail recurre cada vez más al asado y a las freidoras de aire para presentar las patatas como verduras saludables.
Las estrategias varían en función de la zona geográfica. En Norteamérica, la simplificación de los surtidos y las propuestas de combinación con comidas impulsan el rendimiento. En Europa, la expansión del procesado podría saturar los lineales, a menos que el retail cuide bien sus surtidos. En el Reino Unido e Irlanda, las patatas fritas refrigeradas y congeladas y las guarniciones preparadas siguen ganando cuota de mercado, mientras que los formatos pequeños muestran potencial. Australia y Nueva Zelanda registran una fuerte demanda de productos envasados y fáciles de usar. En Asia, el crecimiento de los productos frescos no es comparable al aumento de la demanda de snacks y QSR. En África y América Latina, los productos frescos siguen siendo fundamentales, pero los formatos congelados y de snack están ganando terreno allá donde mejoran los sistemas para la preservación de la cadena de frío.
El crecimiento del procesado determina la selección de variedades, el almacenamiento y los plazos de contratación. La irrupción de China como exportador de patatas fritas congeladas, junto con la capacidad de Norteamérica y Europa, está provocando una reconfiguración de los flujos comerciales. Se recomienda a los productores que suministran tanto al mercado fresco como a la industria una gestión específica de los canales de ventas y que adapten la agronomía a las especificaciones requeridas.
Los indicadores por países reflejan estos cambios. Estados Unidos registra una menor disponibilidad total por persona; las plantaciones de la UE-4 apuntan hacia un excedente; la demanda del Reino Unido se mantiene estable, pero exige una selección de productos más específica; India está aumentando su capacidad de transformación; y el crecimiento de las exportaciones chinas está influyendo en la dinámica de la oferta asiática.
La tendencia general muestra que las patatas frescas están cada vez más orientadas hacia los formatos de conveniencia, mientras que los productos procesados marcan gran parte del ritmo del mercado.
Fuente: Potato News Today