A pesar de las altas expectativas al inicio, la temporada de cebollas no marcha bien. "La caída significativa de los precios no se ha traducido aún en aumento de los pedidos. Se están enviando algunas cebollas a Europa del Este, pero en volúmenes apenas reseñables. En las circunstancias actuales del mercado, muchos clientes están prefiriendo esperar. Saben que las cebollas que pidan ahora probablemente estén aún más baratas de aquí a unos días", dice William Nannes, de JP Beemsterboer Food Traders.
"Hemos registrado una fuerte caída de los precios en las últimas semanas y, de hecho, ahora prácticamente no hay mercado. Ahora me están ofreciendo cebollas por 28 céntimos, y si no acepto, pronto podré conseguirlas más baratas", continúa William. "Pero ahora hay que recoger lotes de los agricultores que se vendieron por 40-45 céntimos. Solo espero que los agricultores tengan buenos contactos y que no les rechacen con demasiada facilidad. No sé a dónde podrán ir todas las cebollas que quedan para el resto de la temporada; esa demanda tendrá que venir de Europa. He estado viendo volúmenes de exportación de 14.000 toneladas durante dos semanas y no creo que vayan a aumentar a 20.000 toneladas de la noche a la mañana".
"Nunca llegué a entender las altas expectativas que ha habido durante toda la temporada. Los precios no han dejado de subir, pero esas subidas no han tenido justificación. En el congreso Euronion en Italia, ya se vio que las cosechas en general eran bastante buenas. Pero manejamos unos precios demasiado altos que nos han dejado fuera del mercado. El año pasado, la feria de Berlín permitió un impulso en el precio de las cebollas, que llegaron al euro, pero este año las cosas no han marchado igual de bien. Nuestro exdirector Peter Beemsterboer siempre dice: '99 de cada 100 veces, si empiezas demasiado alto, terminarás cayendo'. Nos hemos sacado del mercado nosotros mismos".
"Sigue habiendo escasez de cebollas rojas, pero también en este caso dudo que podamos mantener los precios a niveles altos en cuanto Egipto entre en el mercado. Además, hay mucha más competencia por parte de nuestros antiguos destinos de exportación, que han logrado avances significativos en sus producciones. A quienes dispongan de existencias les aconsejaría que no esperen demasiado si pueden deshacerse de sus cebollas ahora. A fin de cuentas, la calidad tampoco va a mejorar. Además, parece que las tendencias del mercado están cambiando, ahora que todo el mundo va ya teniendo una idea de lo que está por llegar el año que viene".
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William Nannes
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