Alemania: Precios más altos que en 2014, pero menores beneficios

"En general, opinamos que los beneficios de este año serán en torno a un 15 por ciento menores que en 2014", indica Simon Schumacher. "En primer lugar, comenzamos más tarde la temporada y hemos tenido menos sol. La tormenta de finales de marzo dañó los campos. Hemos perdido mucho calor debido a que los plásticos cobertores se dañaron o se soltaron".

"Nuestros consumidores han disfrutado la calidad esta temporada", explica Schumacher. "Estuvimos mimados por un crecimiento constante", añade. "Los cosechadores trajeron los espárragos y apenas tuvimos problemas de calidad, los cuales se dan cuando tenemos grandes fluctuaciones de temperatura. Este no fue el caso. Esta temporada será recordada como una de excelente calidad, buenas variedades y buen sabor".

La larga sequía que ha afectado a casi toda la agricultura del país en las últimas semanas tuvo relativamente poca influencia en las explotaciones de espárragos, asegura Schumacher. "Gracias a la tecnología agrícola, hemos tenido un equilibrio de agua óptimo. Y la protección ante la evaporación que ofrece la cobertura plástica desempeña un papel importante".

"Los precios se han mantenido a un nivel similar en comparación con el año pasado", indica Schumacher, "quizá hasta un poco más altos. Al comienzo de la temporada, el precio era relativamente estable. En mayo, el precio mayorista cayó por debajo de la media de los dos últimos años". Estos factores influyen en las expectativas de Schumacher de que el precio al consumo medio sea en 2015 de aproximadamente seis euros.

La industria ha tenido que hacer frente a un aumento de salarios de alrededor del 20 por ciento debido a las leyes recientes para la regulación de los salarios mínimos legales. "Los salarios han aumentado y, desafortunadamente, no hemos podido ajustar nuestros precios de forma acorde", continúa Simon Schumacher. "El ajuste de precios en la venta directa ha sido muy bien aceptado por los clientes. Los clientes habituales han reconocido la calidad y la frescura". Schumacher añade que en los supermercados, la oferta y la demanda han influido en los precios. "Los clientes que se preocupan por los precios compran en los supermercados y ahí el precio no se ha podido ajustar para compensar el aumento de costes provocado por el salario mínimo".

Schumacher opina que en el futuro los agricultores seguirán invirtiendo en equipamiento, lo que aumentará la productividad. "Se cosecharán más kilos en menos tiempo", explica. "Las inversiones en técnicas que permiten una cosecha más temprana y que aumentan la productividad, se han incrementado". Como resultado del salario mínimo, en especial los cosechadores más veteranos ya no serán contratados, según Schumacher. "Aquí la edad es importante", apunta. "A cierta edad, ya no puedes cosechar la cantidad de espárragos requerida para obtener beneficios. Esto nos preocupa en el aspecto humano". Según Simon Schumacher, "en el futuro los pequeños negocios sufrirán especialmente los efectos del salario mínimo. Surgirán problemas a raíz del aumento del coste de la mano de obra y tendrán dificultades para encontrar sucesores para la explotación".