Las exportaciones totales de clementina de Chile en 2018 se estimaron en 52.000 toneladas, y a finales de 2018 terminaron siendo 63.198 toneladas, un 54 por ciento por encima de las 41.000 toneladas de 2017, según el Comité de Cítricos de Chile. Dicha estimación para 2018 es aproximadamente el doble de las exportaciones de 2014. Sin embargo, Chile ha pronosticado una caída del 3 por ciento en las exportaciones de cítricos para la temporada 2019, y las clementinas son las responsables de la mayor caída.
El Comité de Cítricos de la asociación de exportadores ASOEX dijo que los volúmenes de clementina probablemente caerían un 8 por ciento y las naranjas un 3 por ciento. Se espera que las exportaciones de limón y mandarina sean similares a las del año pasado.
Sin embargo, el comité expresó que espera "muy buena producción" en términos de tamaño y calidad gracias a las condiciones de producción favorables en la zona chilena.
Una caída del 8 por ciento en las exportaciones de clementina reduciría el nivel de este año a 58.142 toneladas, frente a los 63.198 del año pasado.
Juan Enrique Ortúzar, presidente del Comité de Cítricos, comentó: “Después de un año de alta producción, la floración es a veces menos intensa. En las clementinas, creemos que habrá una caída de entre el 5 y el 10 por ciento en comparación con el año pasado".
Se pronostica que las naranjas llegarán a 97.000 t, en comparación con las 99.556 del año pasado. "En general, el desafío es abrir nuevos mercados, y esta temporada, cosechar fruta cuando esté madura, sin prisas, porque es importante mantener un buen nivel de calidad para entrar en buenos programas", explicó Ortúzar.
Ortúzar agregó que las naranjas chilenas competirían con las Valencia californianas y las Navel sudafricanas. “El mercado de los Estados Unidos ha ido creciendo, pero a medida que la oferta ha aumentado, los precios han ido bajando. Sin embargo, cada temporada tiene sus sorpresas y aún es muy temprano para predecir qué pasará".
Se pronostica que las mandarinas registrarán exportaciones de 107.000 toneladas, en comparación con las 107.337 toneladas del año pasado. La estimación se ha realizado en medio de las altas reservas de mandarina en los Estados Unidos. Sin embargo, Ortúzar dijo: "Nuestro reto es llegar con un producto impecable en términos de calidad y tamaño".
Se espera que las exportaciones de limón lleguen a 88.000 toneladas, en comparación con las 88.361 toneladas del año pasado. Ortúzar destacó que todavía hay mucha fruta de California y España, lo que supone un desafío para Chile.
Aunque las Halos y las Cuties representan aproximadamente entre el 85 y el 90 por ciento del mercado durante los meses de invierno, ese porcentaje disminuye significativamente en los meses de verano y es ahí donde se encuentra la oportunidad para Chile y otros países productores de cítricos.
Las clementinas chilenas estarán disponibles principalmente desde mediados de mayo hasta mediados de agosto, mientras que las mandarinas se enviarán desde agosto hasta mediados de noviembre. Los productores en Chile esperan un aumento en las zonas de producción del norte, ya que el aumento de las precipitaciones en el último año y la expansión de la superficie de cultivo ha aumentado las perspectivas de producción en aproximadamente un 20 por ciento en comparación con 2018.
"También tenemos empresas en las Regiones IV-V de Chile que se benefician de una ubicación y un clima muy favorable, por lo que están teniendo cosechas de clementinas desde marzo y de naranjas desde abril", continuó Ortúzar.
Chile controla la mayor parte de las importaciones de mandarinas de verano de EE. UU., según las estadísticas comerciales de 2017, lideradas por más de 20 empresas chilenas productoras de cítricos en Chile.
Los cítricos de Chile se despachan principalmente al puerto estadounidense de Filadelfia, pero Chile también exporta a otras partes del mundo como Canadá, Europa y Asia.
Para más información:
Juan Enrique Ortúzar
Chilean Citrus Committee
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citricos@asoex.cl
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