La Asociación Interprofesional del Melón (AIM) presentó ayer en medFEL sus previsiones de plantación de melón para 2025. Para las tres cuencas de producción, Marruecos, Francia y España, la superficie disminuye, un "descenso inédito", según Jérôme Jausseran, vicepresidente de la AIM. He aquí una actualización por países. 
Marruecos: una reducción vinculada a la incertidumbre normativa
La reducción de las superficies en Marruecos es de 250 hectáreas, con lo que el total este año asciende a 1.040 hectáreas. En concreto, en la región de Kenitra, las superficies se mantienen estables en 120 hectáreas (principalmente Charentais amarillo); en Marrakech, las superficies descienden (-160 hectáreas) hasta 760 hectáreas (90% Charentais verde), de las cuales un 50% son de campo abierto y un 50% invernadas. En Agadir, el descenso es de 30 hectáreas hasta situarse en un total de 140 hectáreas (Charentais verde) y, por último, Dajla pierde 60 hectáreas, con lo que el total queda en 210 hectáreas (Charentais verde).
Según Rémi Javernaud, coordinador de la AIM, se trata de una reducción de las superficies sin precedentes, vinculada a la "incertidumbre normativa". Para Jérôme Jausseran, también hay "problemas económicos debidos a una gran presión sobre el riego, con solo un mes de autorización (diciembre/enero)". Estos riesgos desaniman a muchos productores, que reducen sus superficies. "Pero el Atlas sigue blanco, así que hay reservas para el regadío. Además, están previstas nuevas inversiones (presas) para garantizar la producción a largo plazo".
Cuarto año de retroceso para España
Por cuarto año consecutivo, España experimenta un acusado descenso de sus superficies. "Desde 2021, la superficie se ha reducido a la mitad", detalla Rémi Javernaud. "Nos preguntamos cuándo va a parar". El total de este año ha bajado en 400 hectáreas, hasta las 2.350, con un descenso especialmente acusado en la zona de Murcia/Alicante (80% de Charentais amarillo). Las razones principales son la falta de tierras, el acceso al agua y el aumento de los costes de producción. En detalle: el descenso en Murcia/Alicante es de 300 hectáreas, lo que sitúa el total en 1.700 hectáreas. Almería también desciende en 30 hectáreas (Charentais verde), para un total de 270 hectáreas. Sevilla ha perdido 50 hectáreas, por lo que el total se queda en 250 hectáreas, y en el resto de regiones el retroceso ha sido de 20 hectáreas, con un resultado final de 130 hectáreas.
El mes pasado se registraron lluvias torrenciales que alteraron el calendario de plantación. El cuajado de los frutos todavía no ha terminado, por lo que persiste la incertidumbre, aunque la campaña debería ser más larga. El producto español debería llegar a los lineales entre el 20 y el 25 de mayo.
Francia: la campaña de 2024 ha dejado huella
Tras una campaña de 2024 "extremadamente difícil desde el punto de vista económico para las estructuras", la campaña de 2025 ha registrado un descenso de 410 hectáreas hasta un total de 10.240 hectáreas. En detalle: el centro-oeste registró un descenso de 180 hectáreas, para un total de 2470 hectáreas; el suroeste también registró un descenso de 230 hectáreas, para un total de 2070 hectáreas. Las superficies del sudeste se mantienen estables, con un total de 5700 hectáreas. Estabilidad también para las demás regiones y para la producción ecológica.
En el sudeste se registraron algunas lluvias (segunda quincena de marzo), que alteraron el calendario de plantación. Todavía es pronto para sacar conclusiones, pero existe el riesgo de que se materialicen sus consecuencias en junio. En el suroeste y el centro-oeste de Francia, el calendario de plantación es bueno y el tiempo ha sido benévolo.
"Hemos tocado fondo y necesitamos urgentemente recuperarnos", añade Jérôme Jausseran. La AIM quiere frenar la erosión de la superficie (en descenso desde hace 12 años) "revalorizando el melón". En particular, el melón no sufre "problemas de consumo", ya que es una de las frutas más apreciadas por los consumidores. Para la presidenta de la AIM, Myriam Martineau, "hay que devolver la confianza a los meloneros franceses. Esta falta de confianza mina la moral de los productores, lo que se traduce inevitablemente en un descenso de las superficies".
Las sandías ganan terreno
Aunque la asociación no ha observado un aumento de la diversificación hacia otros tipos de melones, la producción de sandías en Francia está en alza. La superficie se sitúa actualmente entre 600 y 700 hectáreas, quizás incluso 800 hectáreas (es difícil hacer un seguimiento de la superficie). Y el mercado también está al nivel esperado. Jérôme Jausseran confirma que han "encontrado las líneas de origen francés", señalando el valor de la sandía francesa como producto premium. "También estamos trabajando en un tipo especial de sandía: la minisandía, que está haciéndose sitio en el mercado, sobre todo entre los jóvenes". Aunque la superficie de sandías está aumentando, no hay que preocuparse por los melones, ya que, según la AIM, no se ha demostrado que las sandías compitan con ellos.