Desde 1724, la empresa familiar Daniels Frukt cultiva frutas y hortalizas en Västanträsk, Finlandia, y ya va por su undécima generación. Ubicada en las islas Åland, esta región es la que más horas de sol recibe de todos los países nórdicos y goza de otoños largos y cálidos, por lo que es idónea para la agricultura. De hecho, a pesar de su pequeño tamaño, el 60% de las peras y manzanas de todo el país se produce en Åland.
En la actualidad, la familia Daniels cultiva 15 hectáreas de manzanos y 2,5 hectáreas de perales en su plantación original en Västanträsk, que hace poco ampliaron con otras 5 hectáreas de manzanos en Åttböle. Aunque las tradiciones de las generaciones anteriores siguen muy arraigadas en la empresa, la familia también mira hacia el futuro y sustituye ocasionalmente las variedades antiguas por otras nuevas que tengan mejor sabor y mejor aspecto, y que necesiten fumigarse menos.
La cosecha transcurre desde mediados de agosto hasta marzo o abril, y las existencias suelen durar hasta febrero o abril. Por otra parte, Daniels Frukt posee sus propias plantas de clasificado y envasado en Västanträsk, además de almacenes frigoríficos con una capacidad total de unas 750 toneladas, de las cuales 300 toneladas se almacenan en cámaras especiales con un nivel de oxígeno muy bajo (ULO, por las siglas en inglés de "Ultra Low Oxygen").
"Recolectamos las frutas con bolsas especialmente diseñadas que vaciamos con cuidado en uno de los cuatro cajones de nuestros camiones. En el periodo de más ajetreo de la temporada, cuando está a punto de terminar, recolectamos entre 20 y 40 toneladas al día. Al principio de la temporada, la cifra es mucho menor porque solemos hacer dos o más rondas; recolectamos las más maduras en la primera ronda y luego esperamos a que hayan madurado más frutas para seguir recolectando y mantener una buena calidad", explica Ben-Erik Daniels.
La empresa da trabajo a entre 5 y 30 empleados, dependiendo de la época del año, y, para recolectar las manzanas que están a mayor altura en los árboles, utiliza plataformas ajustables capaces de aguantar el peso de hasta cuatro cajones (1,2 toneladas), que luego se cargan directamente a los camiones. Este sistema evita que las manzanas se ensucien de tierra y permite a cada empleado recolectar el doble de frutas de las partes más difíciles de alcanzar. Las plataformas también son útiles cuando no hay cosecha, para podar y clarear los árboles, para colocar bandas de feromonas, etcétera.
"Por supuesto, nuestra mayor prioridad es recuperar nuestras inversiones y cuidar de nuestros huertos, pero también nos parece importante invertir cada año en equipamiento que nos ayude a mejorar la calidad, en soluciones más beneficiosas para el medioambiente o en maneras de reducir los costes de mano de obra", afirma Daniels.
Como parte de su inversión continua, Daniels Frukt compró hace poco una máquina clasificadora Greefa Combisort, de la empresa holandesa Greefa.
"Sopesamos varias opciones y llegamos a la conclusión de que la Greefa Combisort era la que trataba a las frutas con más suavidad, por ejemplo, con unas solapas que reducen los golpes. Además, se puede mejorar con su sistema para medir la calidad interna y externa, y está diseñada de forma que encaja perfectamente en nuestra planta de clasificado. Gracias a ella, podemos clasificar muchas más frutas al día para cubrir mejor la enorme demanda del mercado y, lo que es más importante, ofrecer una calidad excelente para que los consumidores vuelvan a comprar", concluye el productor.
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Ben-Erik Daniels
Daniels Frukt
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