La demanda de productos hortofrutícolas preprocesados y ultrafrescos ha aumentado notablemente en Alemania en los últimos años, sobre todo en el sector de la restauración. Sin embargo, las especificaciones de los productos en cuanto a unidades de envasado evolucionan de forma diferente, informa Henrik Rolf, codirector general de Köckerling, con sede en Delbrück (región de Paderborn). "A las panaderías y cadenas de tiendas les gustan especialmente los tamaños de envase más pequeños, como las unidades de 250 gramos. Para reducir el esfuerzo en la cocina y trabajar con más eficiencia de recursos, los servicios de restauración colectiva y los grandes consumidores, en cambio, piden específicamente envases grandes, de entre 1 y 2,5 kilogramos o incluso mayores. Así, curiosamente, el mercado de IV gama parece moverse en dos direcciones opuestas".
Procesamiento de IV gama.
Köckerling se fundó en 1947 y en las últimas décadas ha pasado de ser una explotación familiar de patatas a convertirse en un proveedor de renombre de diversos productos de IV gama. La empresa se centra sobre todo en el suministro a la restauración y la industria alimentaria en un radio de 250-300 km. Rolf señala: "Actualmente, el sector minorista representa alrededor del 10% de nuestras actividades empresariales. Sin embargo, nos esforzamos por ampliar este segmento en los próximos años, entre otras cosas porque el coronavirus nos ha demostrado lo importante que es contar con una segunda fuente de ingresos estable".
El equipo directivo de Köckerling, con Henrik Wolf (izq.) y Johannes Köckerling.
La oferta de productos frescos de conveniencia en el comercio minorista alemán es inferior a la de los países europeos vecinos. "Sin embargo, no hay que olvidar que las frutas y hortalizas congeladas están firmemente arraigadas en nuestra cultura. Esto significa que muchos consumidores, sobre todo los de más edad, siguen prefiriendo los congelados a los productos de conveniencia frescos. Esto está cambiando lentamente a medida que los consumidores más jóvenes crecen con estos productos. También es importante señalar que no solo ha mejorado significativamente la selección de productos de conveniencia, sino también la calidad. Se tiende a utilizar menos conservantes, lo que redunda en beneficio de la calidad de los productos. Donde veo un mayor potencial de optimización es en los envases. Seguimos viendo que los envases de plástico disuaden a los consumidores. Sin embargo, siempre hay que mirar a ambos lados, porque al final no debe comprometerse la seguridad alimentaria. También prestamos mucha atención a la reciclabilidad de los respectivos envases de plástico. Cuanto menos material compuesto utilicemos, mejor. En consecuencia, intentamos utilizar monomaterial si es posible".
Balanza multicabezal.
Picos y valles en la adquisición de materias primas
"En cuanto a las patatas, nuestras necesidades de materia prima pueden satisfacerse en gran medida con productos de nuestros campos", prosigue Rolf. Por lo demás, las materias primas necesarias para la transformación proceden de proveedores cercanos y lejanos. "En cuanto al aprovisionamiento, tenemos algunos años difíciles a nuestras espaldas. 2018 estuvo marcado por una sequía extrema y la correspondiente escasez. Luego vino la covid, con altibajos extremos. Tras la covid, tenemos la guerra de Ucrania y la crisis energética. La incertidumbre asociada, especialmente en lo que respecta a productos de almacenamiento como patatas, cebollas y zanahorias, hace que cada vez sea más difícil hacer una evaluación concreta del mercado y determinar precios fijos. Para contrarrestar la escasez y poder ofrecerlo todo en ese momento, nos esforzamos por encontrar proveedores dobles para cada artículo. Sin embargo, las condiciones meteorológicas extremas provocan repetidamente escasez, especialmente de los productos españoles".
Las instalaciones de envasado.
Expansión de la marca propia y capacidades
Para estar bien preparada para el futuro, Köckerling seguirá invirtiendo, revela Rolf. "Al principio de la crisis de covid, lanzamos nuestra marca Fresh in Love para el sector minorista. Nos gustaría ampliar esta línea de productos en los próximos años. Además, en los dos últimos años hemos invertido en nuestras instalaciones y en tecnología de planta. Queremos continuar esta estrategia de optimización de procesos para poder producir más rápido y, sobre todo, con mayor calidad".
Cinta de secado.
Imágenes: Köckerling GmbH & Co. KG 
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