Desde hace décadas, en Uganda, África oriental, se secan frutas, principalmente piñas, mediante la exposición al sol. "Este método de secado no permite ni calidades estables ni volúmenes de producción predecibles. Debido a los riesgos de calidad asociados, los pequeños agricultores pierden hasta el 40 por ciento de su volumen total de producción. Además, tienen que asumir ellos mismos ese riesgo", explica el Dr. Daniel Neyer. En estrecha cooperación con la Universidad de Innsbruck y la oficina de ingenieros Neyer Brainworks, TWIGA Sun Fruits ha estado apoyando a los agricultores ecológicos de la localidad de Kangulumira desde 2021 con asesoramiento y acciones concretas. Gracias a la implantación de las más modernas instalaciones de secado y la creación de nuevos canales de distribución en su país natal, Austria, los ingresos de los pequeños agricultores pueden aumenta de manera considerable, detalla Neyer en la entrevista.
El antiguo método de secado conllevaba grandes pérdidas.
Por ahora, solo se procesan piñas ecológicas. Sin embargo, no se descarta una futura ampliación a otras frutas tropicales.
Tras la fundación de Twiga Sun Fruits GmbH en 2021, el año pasado se llevó a cabo la implementación y puesta en marcha de una solución de sistema innovadora y autosuficiente energéticamente con una instalación de secado de Innotech y equipos de procesamiento de alimentos de Kronen. Mediante energía fotovoltaica y solar térmica, ahora es posible procesar los trozos de piña ecológica de manera delicada y sostenible. Por ahora, las frutas deshidratadas (ya sean anillos o trozos) se comercializan principalmente en línea en la tienda propia: www.twiga-sunfruits.org . Neyer explica: "La relación entre la fruta fresca y la seca es de aproximadamente uno a dieciséis: es decir, de dos piñas con un total de cuatro kilogramos, obtenemos al final un paquete de 250 gramos. Ahora aspiramos a una venta de 7 toneladas al año, con una producción máxima de 9 toneladas al año".
Después del secado, los trozos de piña ecológica se empaquetan en atmósfera protectora y se transportan por vía aérea a Europa.
Fue una decisión consciente comenzar a pequeña escala, continúa Neyer. "Después de todo, no hay que olvidar que lleva mucho tiempo y paciencia construir una confianza mutua. Si logramos eso, tendríamos el potencial de escalar nuestra producción varias veces. Hay muchos agricultores de piña en nuestra región de Kangulumira que entonces tendrían que ser certificados adecuadamente. Mi objetivo a largo plazo es alcanzar un volumen anual de 150 toneladas, para poder exportar un contenedor lleno de piña seca a Europa cada mes. Tendríamos que producir dos a tres toneladas por mes para poder suministrar a las grandes cadenas de mercados ecológicos. Pero es importante para mí que siempre tengamos en cuenta la estrategia del campo a la mesa, es decir, una visión integral de la cadena de valor".
Daniel Neyer (izq.) se informa regularmente sobre los últimos avances del proyecto in situ. Además de su propia producción, Neyer también se ha propuesto ofrecer las instalaciones de secado en el futuro como contenedores estandarizados para cooperativas agrícolas y otros clientes.
Las inversiones conjuntas ya han dado sus frutos, resume Neyer finalmente. "Con nuestro proyecto, proporcionaremos a nuestros socios en Kangulumira un ingreso justo y un aumento sostenible del bienestar. Nuestras campañas TWIGA Sun Fruits duplicarán el precio de venta de exportación de producto ecológico actual de los agricultores por un kilo de piña seca. Nuestro principal objetivo es propiciar el desarrollo de una región rural de Uganda y favorecer sistemas alimentarios sostenibles".
Imágenes: Russel Pictures. Uganda / TWIGA Sun Fruits
Para más información:
Dr. Daniel Neyer
TWIGA Sun Fruits GmbH
Oberradin 50
6751 Bludenz-Außerbraz
info@twiga-sunfruits.org
www.twiga-sunfruits.org