La Unión, entre las subastas que posee en la provincia de Almería y la actividad propiamente comercializadora, da amparo comercial a unos 3000 agricultores cada campaña movilizando un volumen anual medio de unos 350 millones de kilos de frutas y hortalizas. “El año pasado aumentamos facturación y crecimos hasta multiplicar el Ebidta por 3 respecto al año anterior”, explica Juan Manuel Andújar mientras observa el trasiego de compradores y agricultores que han acudido en la mañana a la subasta de El Ejido. “La subasta -continúa- es el modelo de comercialización que levantó Almería y hoy aún representa para nosotros el 30% de nuestra facturación. Esta subasta nuestra de El Ejido es, de hecho, una de las de más volumen de la zona y la que marca el precio en la provincia de nuestra mayor especialidad, el pepino, del que hacemos 220 millones de kilos al año”.
“Almería, hoy por hoy, es de las pocas agriculturas rentables que hay en la Unión Europea. Por cada litro de agua y metro cuadrado de terreno se maximiza el rendimiento de la producción y los agricultores pueden vivir de la rentabilidad que le da su trabajo; es una realidad que los costes han subido, y la financiación es este año uno de los grandes retos a los que nos enfrentamos las empresas de Almería, que hemos pasado en un año de una financiación cercana al 0% a casi el 6%. No obstante, en el resto de Europa, si no fuese por las subvenciones de la PAC, sería imposible vivir de esta actividad”. Y todo ello, sin dejar a un lado la sostenibilidad.
“El sector almeriense lleva dos décadas trabajando en desarrollar una red trófica eficiente en sus invernaderos para el control de plagas, que es algo que hemos conseguido, y se espera que podamos darle en un futuro cercano una vuelta de tuerca al tema de los residuos plásticos de la provincia”.
“Ya se recicla el 100% de los plásticos de cobertura de los invernaderos desde hace años, pero hay una serie de plásticos como los de los suelos, que son más difíciles de gestionar porque implican un mayor desgaste de la maquinaria. Así que para aprovechar esos materiales, una empresa ha desarrollado un proceso para transformar plásticos de todo tipo en hidrocarburos que podría estar disponible a medio plazo”.
“Esta tecnología es capaz de transformar plástico en un 73-74% de diesel tech o gasolina tech, otro 20% en gas natural y el 5-6% del material resultante puede utilizarse como aislante de viviendas, rellenos de asientos de coche, etc. Y lo más increíble es que para reciclar todo el plástico que se produce en Almería se necesitaría únicamente una planta de 20.000 m²”.
“El plástico no es un problema, es justamente lo que nos ha permitido llegar tan lejos; el problema es su gestión, y si Almería puede hacer una mejor gestión acorde con los tiempos que corren, seremos también capaces de llegar más lejos”.
“A la hora de la verdad, Marruecos no ha respondido a los programas de tomate como debía por los virus”
Mientras tanto, la campaña sigue avanzando imparable. “En pepino, nuestro mayor producto, nos enfrentamos a una campaña anómala ya que los volúmenes no llegan a despuntar desde julio debido fundamentalmente a las temperaturas anómalas que hemos estado teniendo; incluso ahora, que estamos en el pico de producción máxima”.
“La berenjena avanza piano piano, con precios que no son malos pero que no son excelentes, y con calibres que esperamos que empiecen a disminuir en las próximas semanas por la llegada del frío”.
“El calabacín ayer estaba en unos 80 céntimos el kilo, pero respecto a esta hortaliza tenemos que recordar que debido a los virus, no está siendo todo lo rentable que debía de ser porque muchos agricultores tienen que ir arrancando sus plantas a medida que se ven afectadas, de manera que al final están cosechando menores volúmenes con mayores costes”.
“Los pimientos, como siempre, se mantiene estables; el California rojo con el valor más alto, en unos 1,30 euros/kilo. Finalmente, los tomates también tienen buenos precios, aunque todos estamos sujetos a los problemas del virus rugoso, incluso si no lo sufrimos directamente, porque para enfrentarlo en el caso de que llegue, tenemos que estar fortaleciendo continuamente a las plantas lo que, además de aumentar los costes, hace que baje la productividad, ya que plantas más fuertes implican entrenudos más largos, por lo tanto menos producción”, explica Juan Manuel. Y el virus rugoso, cada vez más presente, no es un tema baladí: “hay que tener en cuenta lo que le ha pasado este año a Marruecos con el tomate. Hicieron muchos contratos con volúmenes y precios cerrados con Reino Unido, y a la hora de la verdad, no ha respondido a los programas como debía por las virosis que han atacado las plantaciones, principalmente el virus rugoso”.
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