La mayoría de las cebollas orgánicas provienen de regiones como Flevolanda y
Noordoostpolder. No obstante, las cosas han cambiado a lo largo de los años. "Tanto la producción como la calidad han mejorado de forma espectacular, mayormente gracias a la tecnología y a las innovaciones".
Noordoostpolder. No obstante, las cosas han cambiado a lo largo de los años. "Tanto la producción como la calidad han mejorado de forma espectacular, mayormente gracias a la tecnología y a las innovaciones".
Cerca de la mitad de las cebollas se envasas y comercializan con la etiqueta "Organic Onions" y se exportan. El Reino Unido es uno de los destinos importantes.
Uno de los avances tecnológicos más apreciados es la llegada de las variedades resistentes al moho. "Las cebollas no son un producto fácil de cultivar de forma orgánica", afirma André. "Hay que lidiar con las condiciones meteorológicas, los hongos, las infecciones; cosas que se superan mucho más fácilmente en el cultivo habitual. La entrada de las cebollas resistentes al moho es de gran valor para el sector orgánico".
Los hermanos no ven que el sector en su conjunto haya progresado demasiado. "No es que lo estemos haciendo mal, pero no hay duda de que la crisis se nota. Aunque confiamos en que la situación mejore".