El neerlandés Arno van der Maden lleva viviendo en Costa Rica más de diez años y desde allí ha estado ayudando a las compañías de cultivo centroamericanas a profesionalizar los cultivos locales y a exportar para el programa del CBI (Centro de Promoción de Exportaciones neerlandés) frutas y verduras frescas. El programa del CBI incluye cuatro participantes con rambután, incluidas dos asociaciones de productores (FRUTELA, de Honduras, y ASPRAGUA, de Guatemala) y dos compañías (Frutas Exóticas, de Honduras, y Reliable Fruits Guatemala, de Guatemala). “El rambután de Honduras y Guatemala es una alternativa excelente al producto asiático”.
La temporada del rambután está ya al caer y, según Arno, se espera una buena cosecha. “Hasta hace poco muchas compañías se centraban mucho en el mercado local, regional y el norteamericano. Las compañías Frutas Exóticas y Reliable Fruits Guatemala cuentan con la certificación GlobalGAP desde la temporada pasada y han adquirido experiencia enviando rambután a Europa. Para los otros participantes, las dos organizaciones de productores, estamos trabajando en conseguir ese certificado y exportar a Europa está en su lista de deseos”.
“La certificación GlobalGAP todavía no es requisito indispensable para vender a los EE. UU. El paso hacia Europa no es tan grande para las compañías, ya que ya han acumulado mucha experiencia con las técnicas de cosechado y poscosecha y los aspectos fitosanitarios. Para las asociaciones, a las que están adheridas muchos productores, es más difícil, pero no imposible”.
“La ventaja es que el rambután viene de países que los productores conocen por otros cultivos y esto genera confianza. Vemos una demanda en alza para el producto de América Central. La demanda de rambután crece cada año. El producto disfruta de un consumo en aumento que puede explicarse gracias a sus efectos saludables entre otras cosas, ya que el producto tiene altos niveles de vitamina C, hierro y calcio. Lo bueno es que estos participantes tienen suficiente volumen disponible y una ventana de producto interesante para los mercados europeos”, asegura Arno. Juntos, suman más de 300 hectáreas, con una producción de más de 600.000 kilos destinada a la exportación, desde principios de septiembre hasta principios de enero, en función de la ubicación geográfica de las plantaciones y las condiciones climatológicas.
Según Arno, hay fruta de estupendas variedades de rambután disponibles en América Central. “El color es de un rojo intenso y tanto el dulzor como el nivel de jugo son excelentes. La pulpa de la fruta se desprende bien de las semillas. Estos productores son perfectamente capaces de mandar una calidad uniforme de rambutanes a Europa”.
“En Europa, el rambután lo compra a menudo quienes han estado de vacaciones en Asia o son originarios de allí. Por esa razón, la promoción en el mercado europeo es tan importante. Quienes han probado el producto lo compran de nuevo. Lo mismo ocurrió cuando se promocionó el consumo de aguacates; los beneficios se están notando ahora. Por eso hay todavía todo un mundo por conquistar”, indica Arno. “Aún no se pueden encontrar rambutanes en todos los supermercados, sigue siendo un producto exclusivo bastante caro. A menudo se coloca en envases de dos o tres piezas. El rambután se puede utilizar en macedonias, como postre y en postres dulces”.
La corta vida útil del producto es algo que tener en cuenta. Este es el motivo por el que es tan importante que haya renovación de producto en la tienda. En los EE. UU. la velocidad de renovación es mucho mayor. “Durante mis visitas a los Países Bajos a veces me enfado con la forma en la que el rambután se deja en los estantes. El producto suele estar totalmente oscurecido, cuando los productores hacen todo lo posible por cosecharlo en el momento adecuado y suministrarlo a Europa en perfecto estado”.
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Arno van der Maden
N&S del Trópico S.A.
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