"La cosecha oscila mucho de año en año", afirma la oficina. "No toda la fruta es adecuada para la venta". Esto se debe en parte a los ataques de la Drosophila suzukii o drosófila de alas manchadas, que fue detectada por primera vez en Alemania en 2014 y ha causado enormes daños. "Pese a los daños, se han podido cosechar en torno a 56.300 toneladas, un incremento del 16 por ciento respecto al año pasado", explica el portavoz.
Según la oficina, entre el 55 y el 65 de la cosecha total se vende en los mercados de productores. "El año pasado, esa cantidad fue de 34.224 toneladas. Esta temporada, se prevé un volumen de ventas de 31.900 toneladas en los mercados de productores", apunta el portavoz. "Si se suma todo, se obtiene una cosecha total de entre 50.000 y 55.000 toneladas. No supera la media, pero tampoco es inferior a ella".
Este año, la floración tardía, las bajas temperaturas y los largos periodos de sequía han retrasado la cosecha de ciruelas y ciruelas damascenas alrededor de una semana. Se trata de un inicio normal, según la oficina alemana.
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