Según Piet, la calidad de las cebollas de siembra es buena, “aunque hay posibilidad de podredumbre blanca en las cebollas de siembra y Fusarium roseum en las semillas, pero hay que ver cómo se desarrolla. Hasta ahora, la calidad parece bastante buena. El tiempo seco y cálido hace que la productividad varíe al provocar que haya terrenos buenos y otros muy pobres. En general, existe la presión necesaria sobre el mercado y eso es bueno”.
“La cuestión es si habrá suficientes cebollas de siembra y si habrá un hueco entre la temporada de estas y la de las cebollas de semilla. La exportación de cebollas de siembra está funcionando bien y falta ver si las cebollas de semilla son adecuadas para la exportación. El precio está a un nivel de entre 12 y 15 céntimos. Los productores notan que vienen menos cebollas de Europa y de Europa del Este y están muy decididos. Esto hace las cosas más difíciles en el sector comercial”, indica Piet.