Los investigadores estudiaron los registros de desperdicio alimentario de seis Estados miembros de la UE, el Reino Unido, los Países Bajos, Dinamarca, Finlandia, Alemania y Rumanía, de 1996 a 2005.
El Reino Unido es el peor delincuente, pues desperdicia el equivalente en peso de una lata de judías por persona y día, según el estudio.
Casi el 80% de los alimentos desperdiciados en los seis Estados miembros se puede evitar y se ha descubierto que, en teoría, se puede llegar a una tasa de desperdicio cero entre los consumidores de la UE.
Uno de los investigadores, Davy Vanham, indica que esto no solo ahorraría dinero a los consumidores, sino también a las autoridades locales, que deben pagar por la recogida de desperdicios y su tratamiento.
Rumanía registra los mejores resultados en cuanto a desperdicio alimentario, pues desperdicia el equivalente a una manzana por persona y día. "Hemos advertido que en Rumanía, y África, se desperdician menos alimentos porque la población tiende a disponer de menos recursos económicos", apunta.
El desperdicio alimentario total en la UE es de una media de 123 kilos per cápita al año (con una horquilla de 55-190 kilos per cápita al año), aproximadamente el 16% de todos los alimentos que llegan a los consumidores, según el estudio.
Un total de 97 kilos per cápita y año de este desperdicio es evitable.
El Parlamento Europeo instó recientemente a la aplicación de medidas urgentes para reducir a la mitad el desperdicio de alimentos en la UE.
Aunque la mayor parte de los desperdicios consiste en frutas, hortalizas y cereales, presumiblemente debido a que su vida útil es relativamente corta, la carne desperdiciada contiene la mayor cantidad de nitrógeno y agua. Los cereales ocupan el segundo lugar.