Después de años de condiciones económicas pobres, a los cultivos de invernadero al fin les vuelve a ir bien. Los precios están aumentando, los viveros se están vendiendo o alquilando e incluso se están creando compañías nuevas. Los productores de pepinos en particular están teniendo bastante éxito este año.
Jos van der Knaap, de LTO Glaskracht Westland, declara: "Este es el primer año desde hace tiempo en el que muchos propietarios de negocios de invernadero de Westland han podido decir que ha sido un buen año. En general, lo ha sido para los cultivos de hortalizas".
"El año empezó de forma aceptable, pero mejoró a medida que pasaban los meses. Los productores de pepinos en particular han tenido bastante éxito este año, aunque a los tomates, pimientos morrones y berenjenas también les ha ido bien. Los productores de tomates tuvieron tres meses excelentes. De hecho, esos tres meses fueron tan buenos que pueden decir que han tenido un buen año". Hacía ya un tiempo de la última vez que los productores podían decir eso. Según Van der Knaap, esto se debe parcialmente a la mala cosecha de países como España y Polonia. "Allí hizo tanto calor que al final los cultivos no podían aguantarlo más, lo que, por supuesto, condujo a una menor producción", continúa Van der Knaap.
Puntos positivos
Hubo muy pocos puntos positivos en el sector en los años anteriores, pero este año ha sido un impulso fantástico para los invernaderos. "Ya no hay ni un solo negocio de invernadero en venta o en alquiler en Westland", afirma Van der Knaap.
Arne van Aalst, director ejecutivo de la asociación de productores de tomates Prominent, habla de un año con dos caras: "Hasta mediados de agosto, las cosas fueron muy bien hasta hace dos semanas. Eso tiene que ver sobre todo con las condiciones meteorológicas secas y calurosas en países como España y Marruecos. La exportación desde esos países empezó más tarde. Esto tuvo dos ventajas para los productores holandeses; podían exportar a dichos países, ya que iban a entrar más tarde en el mercado, y ahora empiezan a fluir los tomates desde ambos países".
En estos momentos muchos productores de tomates están cambiando sus cultivos. La superficie de tomates de invernadero aumenta un pequeño porcentaje cada año. "Los clientes quieren acceder a tomates de buena calidad durante todo el año. Los productores quieren retener a sus clientes habituales el mayor tiempo posible, y no quieren que se sientan tentados de pasarse a los productores de España o Marruecos. Los supermercados quieren seguridad en lo relativo al suministro, y tenemos que encargarnos de eso".