Uno de los motivos es que hay muchas frutas y hortalizas frescas disponibles como alternativa. "En Italia, el consumo per cápita es de 13 o 14 kilos anuales, mientras que en el resto de Europa, si excluimos los países del Mediterráneo, el consumo es de 40, 50 o incluso 60 kilos per cápita. Nunca llegaremos a esa cifra, pero podemos crecer".
El consumo se ha incrementado un poco en 2015, mientras que los datos de SG Marketing explican que, entre agosto de 2015 y agosto de 2016, el sector de las hortalizas congeladas creció un 1,4% en volúmenes y lo hará otro 2,6% hasta 2020.
En 2015, se vendieron un poco más de 824.000 toneladas de productos congelados, como pescado, carne, pasta semiprocesada, pizza, "snacks", platos y postres. Sin embargo, las principales cantidades fueron de hortalizas, que representaron el 50% de los volúmenes, y de patatas.
Por el contrario, hay que apuntar que la fruta tan solo cubre el 0,2% de los volúmenes vendidos en el sector de congelados. Por cada kilo de fruta congelada, se venden 244 kilos de hortalizas congeladas y 90 kilos de patatas congeladas. Esto se debe a que en Italia hay mucha fruta fresca disponible.
Vittorio Gagliardi, presidente del Istituto Italiano Alimenti Surgelati, en Cibus Tec.
No obstante, el sector de frutas y hortalizas congeladas está creciendo. "Al principio, los productos congelados se percibían solo como útiles en una 'emergencia', mientras que ahora se han convertido en parte de la cocina diaria, ya que son productos 'anticrisis' gracias a su precio constante. Además, también son 'antidesperdicio'. Una investigación llevada a cabo en el Reino Unido estima que un incremento en el uso de productos congelados podría llevar a un 40% menos de desperdicio. Además, son saludables porque no contienen conservantes ni aditivos".
Como explicó Salvo Garipoli (en la foto), de SG Marketing, "los consumidores no tienen la misma percepción que el Istituto Italiano Alimenti Surgelati, porque no saben que los guisantes, por ejemplo, se congelan en las dos horas después de la cosecha, por lo que los tiempos de procesado son más cortos que los del producto fresco". El 35,4% de las frutas y hortalizas congeladas, de hecho, se venden con la marca del distribuidor, quien se centra en destacar el origen del producto.