Bulgaria y Rumanía ocupan los dos últimos puestos en la clasificación de los mayores consumidores de frutas y hortalizas de la UE, según un comunicado del Centro de Análisis Económico en la Agricultura (CAPA) y del Instituto de Economía Agrícola de Bulgaria.
Según los datos de Eurostat de 2014, el 65% de los rumanos y el 59% de los búlgaros mayores de 15 años no consumen frutas ni hortalizas a diario.
De media, el porcentaje de personas que no consumen frutas ni hortalizas a diario en la UE es solamente el 34%, y las razones principales son sus ingresos y su nivel educativo.
En Bulgaria, concretamente, cabe destacar que, en 2015, el consumo per cápita disminuyó a unos 190 kg de hortalizas, tanto frescas como procesadas y congeladas. Esta cifra es un 4% inferior a la de 2014 y un 12% inferior a la de 2000.
El comunicado también señala que, en 2016, la superficie dedicada a cultivar tomates se ha reducido un 4,4%, y la de los pimientos, un 11%. Este año, el país ha producido 110.000 toneladas de tomates y 58.000 toneladas de pimientos.
Las importaciones de hortalizas siguen superando por mucho a las exportaciones. Durante los últimos dos o tres años, las importaciones de Bulgaria se han intensificado, y el mayor aumento corresponde a las de tomates.
Los precios de compra de tomates al por menor y al por mayo en verano de este año fueron casi un 50% más altos que los del año pasado. Las hortalizas suelen aumentar de precio en octubre; los precios mayoristas de los pepinos son un 28% más altos y se espera que suban más en noviembre.
Fuente: investor.bg