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El perejil y apio pueden evitar el almacenamiento de grasa en el estómago

Los científicos opinan que el efecto yo-yo, es decir, recuperar peso tras perderlo haciendo dieta, puede estar causado por una bacteria presente en nuestros intestinos. Aunque nuestro cuerpo pierda peso, los microbios que habitan en nuestro interior se alimentan de restos de grasa durante mucho meses, y cuando volvemos a ingerir alimentos grasos, se abalanzan sobre ellos y provocan que ganemos peso a un ritmo acelerado.

Este efecto podría revertirse, en opinión de los científicos, tomando una bebida con altos niveles de las sustancias que se encuentran presentes de forma natural en las frutas y hortalizas. Estos compuestos, los flavonoides, estimulan que nuestras células quemen grasa en lugar de almacenarla.

Aunque la investigación se ha llevado a cabo en ratones, los científicos opinan que en los humanos es posible que funcione un mecanismo similar.

Uno de los compuestos flavonoides, la apigenina, se encuentra en el perejil, el apio, el apio-nabo y el té de manzanilla. El otro, la naringenina, está presente en el pomelo, la naranja, la piel de tomate y la menta acuática.

El nuevo estudio llevado a cabo por investigadores isralíes ha estudiado cómo unos ratones que se habían vuelto obesos tras una dieta rica en grasas, perdían peso tras seguir una dieta normal. Sin embargo, cuando comenzaban a ingerir alimentos grasos de nuevo, recuperaron peso a un ritmo "acelerado".

La clave del proceso fueron las bacterias "malas" presentes en los intestinos, que reducían los niveles de flavonoides, según los científicos.

Proporcionar a los ratones una bebida con niveles muy altos de flavonoides –más de los que pueden absorber las bacterias intestinales– "ayudó a limitar la ganancia de peso tras la dieta en ratones".

Eran Segal, coautor del estudio, apunta que se necesita seguir investigando antes de que el proceso funcione en humanos.

Más información: www.dailymail.co.uk
Fecha de publicación: