A pesar de que la variedad de color verde es un producto muy arraigado y consumido, el calabacín amarillo es casi un desconocido. Los calabacines verdes se pueden encontrar en cualquier supermercado, pero hay que buscar mucho para encontrar uno amarillo, un producto exótico que no debería serlo.
Los mayoristas y la industria del cáterin tratan de ayudar a esta hortaliza a salir de las sombras. "Hemos descubierto que estos dos sectores en concreto compran este producto a granel", afirma Patrick Stoffels, de BUD Holland. "Por el contrario, los supermercados prefieren el calabacín verde".
Este importador de productos exóticos solamente ofrece calabacines amarillos durante la temporada israelí. "Este año, la temporada comenzó la semana 44, y esperamos que transcurra hasta finales de febrero de 2017", explica Stoffels. Los calabacines amarillos israelíes tienen su pico de producción en diciembre, pero se pueden comprar todo el año, ya que Países Bajos y España también los cultivan.
Su superficie de cultivo en Israel ha aumentado un poco con respecto a la del año pasado. "Calculamos que produciremos entre 50 y 80 toneladas este año", continúa. "Si las condiciones meteorológicas siguen siendo buenas, podríamos llegar a las 80 toneladas sin problemas". Estos calabacines amarillos se venden por toda Europa. "Cada año vemos más demanda, aunque siempre depende de cuándo termine la temporada en España y en Países Bajos", concluye Stoffels.
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