Tras una actualización del presidente Macron y la canciller Merkel al Consejo Europeo sobre el estado de implementación de los acuerdos de Minsk, el 5 de julio de 2018, el Consejo prolongó las sanciones económicas dirigidas a sectores específicos de la economía rusa hasta el 31 de enero de 2019.
El Consejo ha adoptado esta decisión mediante procedimiento escrito y, siguiendo la norma para todas las decisiones de este tipo, por unanimidad. Las medidas se dirigen a los sectores financiero, energético y de defensa, y el sector de artículos de doble uso. Se presentaron originalmente el 31 de julio de 2014 durante un año en respuesta a las acciones de Rusia que desestabilizaron la situación en Ucrania, y se fortalecieron en septiembre de 2014.
Las sanciones económicas prolongadas incluyen:
- limitar el acceso a los mercados primarios y secundarios de capital de la UE a 5 grandes instituciones financieras estatales rusas y sus subsidiarias establecidas fuera de la UE, así como tres importantes empresas energéticas rusas y tres de defensa;
- imponer una prohibición de exportación e importación al comercio de armas;
- establecer una prohibición de exportación de artículos de doble uso para uso militar o usuarios militares en Rusia;
- restringir el acceso ruso a ciertas tecnologías y servicios que pueden utilizarse para la producción y exploración de petróleo.
- medidas restrictivas individuales, a saber, prohibición de visado y congelación de activos, actualmente para 155 personas y 38 entidades hasta el 15 de septiembre de 2018;
- medidas restrictivas en respuesta a la anexión ilegal de Crimea y Sebastopol, limitadas al territorio de Crimea y Sebastopol, actualmente en vigor hasta el 23 de junio de 2019.
La duración de las sanciones estaba vinculada a la implementación completa de los acuerdos de Minsk por parte del Consejo Europeo el 19 de marzo de 2015, prevista para el 31 de diciembre de 2015. Como eso no se ha dado, se han mantenido.