"Durante más de un mes, hemos vivido situaciones muy dramáticas en todo el sur de Italia". Este es el testimonio de Giorgio Mercuri, presidente nacional de Fedagri-Confcooperative y empresario.
Cultivo dañado
Las condiciones meteorológicas extremas de los últimos meses –lluvias fuertes, temperaturas por encima de la media y un alto grado de humedad– han desalentado a los productores que ya tenían dificultades por la tendencia general del mercado. "Los diez primeros días de octubre hubo fuertes lluvias seguidas de un calor húmedo. Inevitablemente, la niebla nocturna dañó los cultivos. El brócoli, el hinojo, el repollo y la lechuga se pudrieron en los campos, así que ya no se pueden vender".
Cultivo dañado
"La producción ha caído un 70% en comparación con el año pasado. Además, los distribuidores no saben reconocer el gran esfuerzo de los operadores. Se requiere una selección meticulosa tanto en el campo como en el almacén para poder enviar un producto de calidad, y aun con todo no tendrá una buena vida útil".
Como indica Mercuri, la situación no da señales de mejora. "Las fuertes lluvias de las últimas horas han retrasado todavía más la cosecha del poco producto que quedaba. Creemos que no habrá producto suficiente para satisfacer la demanda nacional en los próximos 20 días. Mientras, procuramos servir a todos los mercados".
Cultivo dañado
"En nuestra zona hace bastante viento y esto permite que el aire se mantenga sano y limpio, de forma que se evita que los cultivos de otoño-invierno se ven afectados por hongos. Por desgracia, no hay más que mirar los últimos datos de los parques eólicos para darse cuenta de que hace seis meses que aquí no sopla el viento".
"No es una cuestión únicamente de repercusiones económicas o pérdidas de empleos. El problema es que los productores tienen miedo de que el Gobierno no les dé el apoyo económico que necesitan. Esta actitud ha llevado a algunos productores a abandonar, sobre todo en los últimos tiempos".
"Si la situación no mejora, los precios subirán para Navidad para gestionar los pedidos. Ojalá todo el sector agrícola se beneficiara de esos aumentos. Si persisten estas condiciones meteorológicas, el sector agroalimentario italiano sufrirá un enorme cambio".