La huelga ilegal de los trabajadores temporales de la terminal TPS del Puerto de Valparaíso cumple ya un mes. Esta semana la violencia ha llegado a su punto más alto, lo cual desembocó en una reunión el lunes entre los dirigentes de los huelguistas y las máximas autoridades de los ministerios del Trabajo y de Transportes y Telecomunicaciones. Tras horas de conversaciones, el ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, anunció que se había alcanzado un preacuerdo.
Esta es la información que publica la prensa nacional chilena, que explica que este preacuerdo contempla, por ejemplo, cambios en las contrataciones de los trabajadores portuarios y otras materias relacionadas con la seguridad en el trabajo. Por otra parte, se quiere constituir una mesa de trabajo con la participación de los ministerios del Trabajo y de Transportes para la resolución de las causas de esta huelga. Se menciona que las autoridades tienen esperanzas en el preacuerdo, dado que mejora muchas de las condiciones de trabajo que llevaron a la declaración de la huelga.
Fuente: La Tercera
Efectos sobre el sector agrícola
El sector agrícola ha seguido de cerca el conflicto portuario, pues los productos se suelen transportar en contenedores frigoríficos. La prensa nacional informa de que en este mes de huelga se han exportado más de 116.000 toneladas de frutas como cerezas, aguacates, arándanos y manzanas. Por ahora, la huelga no ha influido, pues toda la carga se ha enviado a puertos alternativos como el de San Antonio.
De acuerdo con La Tercera, el puerto de San Antonio ha incrementado el volumen de fruta transportada de 7.400 a 79.000 toneladas entre el 16 de noviembre y el 18 de diciembre. En ese mismo lapso, el puerto de Valparaíso solo ha podido enviar 5.200 toneladas de fruta, frente a las 59.000 toneladas del año pasado. “San Antonio ha respondido para que podamos sacar nuestros contenedores, pero si este conflicto no se soluciona, conforme avancen los días, los volúmenes de fruta irán aumentando, por lo que debemos contar con toda la infraestructura portuaria disponible”, manifiesta el presidente de Fedefruta, Jorge Valenzuela, según el citado diario.
También Ricardo Ariztía, presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), ha dado a conocer su opinión sobre este paro ilegal: “Es clave fortalecer la institucionalidad para que las huelgas ilegales no sigan dañando a los distintos sectores económicos y, por ende, la imagen del país”. Subraya que Chile es un país que opera en todo el mundo y tiene compromisos internacionales que cumplir, “por eso no es posible que un puerto esté paralizado por tanto tiempo, debido a la acción de unos pocos”.
Aritzía acaba diciendo que el paro portuario no ha tenido consecuencias directas en el sector agrícola, pues la mercancía se ha reasignado y se ha exportado por otros puertos, como el de San Antonio. En sus palabras, el paro “ha puesto a Chile en una situación de incertidumbre respecto de los contratos comerciales adquiridos con cadenas de supermercados del mundo”.