Actualmente, los precios de los berries holandeses se están recuperando después de una caída en julio. Hay Geurts, de la cooperativa holandesa de productores de arándanos Blauwe Bessen Platform, comenta: "En los meses de verano, la mayor competencia vino de Polonia, Portugal, Rumanía y España. Estos países se unieron a la UE hace años y desde entonces han recibido muchos subsidios para la producción de frutos rojos, incluidos los arándanos, lo que ha generado una competencia desleal. Los arbustos en esos países están ahora en plena producción. Sobre todo Polonia nos ha causado dolores de cabeza, pero ahora estamos viendo un desarrollo positivo: los polacos mismos están comenzando a consumir arándanos cada vez más. Esperemos que eso también ocurra en los Países Bajos".
"Parece una contradicción, pero muchos supermercados holandeses actualmente obtienen los arándanos de países como Polonia y Portugal, mientras que la temporada holandesa todavía está en curso. Eso, por supuesto, tiene que ver con el precio, pero también con ciertos supermercados y empresas envasadoras. Tienen líneas directas con países extranjeros y es muy difícil intentar acaparar esa cuota de mercado. Es realmente una pena. Los supermercados y los consumidores deberían estar mucho más orgullosos de los productos de su propio país. Los retailers solo deberían poner los productos importados en los estantes cuando se agoten los arándanos holandeses. Eso ocurre de manera natural en invierno, pero también debería ser así en verano. Además, las emisiones de CO2 que se pueden ahorrar de esta manera son enormes".
Respecto a los precios, Hay todavía no está completamente satisfecho. "Al principio eran buenos; a mediados de la temporada, menos, y afortunadamente ahora al final están repuntando de nuevo. Pero deberían ser más altos; se nota que estamos jugando unos frente a otros. Los supermercados ganan 12/13 euros/kilo, mientras que el beneficio del productor generalmente solo es de entre 4 y 5 euros".
Los retailers también ejercen una gran influencia en el envasado. Debido al rechazo cada vez mayor a los envases de plástico, los productores optan por alternativas más sostenibles. "El envase sellado es ahora la tendencia en los Países Bajos, que es mejor para el medio ambiente y tiene un efecto positivo en la vida útil de los berries. Desafortunadamente, muchas compañías extranjeras todavía utilizan sobre todo envases de plástico duro para poder transportar los arándanos", concluye Hay.
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Hay Geurts
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