La empresa familiar Anjari, situada en San Esteban (Chile), una de las principales áreas frutícolas del país, exporta sus productos a los cinco continentes. Fundada en 1990, fue pionera en el secado de la uva pasa y en la actualidad ha alcanzado un volumen de producción anual de 16.000 toneladas. Su crecimiento y su exigencia frente a la calidad del producto han propiciado que adquieran la clasificadora por caída libre Helius 1600 de Tomra, que garantiza la selección de productos libres de defectos y que es la primera máquina de mayor capacidad de procesamiento instalada en la industria de las pasas.
La compañía chilena ya cuenta con otros dos equipos de Tomra, detectores IXUS (modelos 570 y 800), que emplean la tecnología de rayos X para detectar y eliminar elementos extraños (metales, vidrio, piedras, plásticos de alta densidad, etcétera) del producto.
Las variedades de uva empleadas por Anjari son Thompson, de forma alargada y un poco agridulce, y Flame, redonda y muy dulce, que es precisamente la uva que da renombre a Chile en el sector de las pasas. Tras un primer proceso de lavado, las pasas pasan al primer equipo de Tomra de detección, equipado con varios tipos de láser: Helius 1600. Este equipo tiene, además, diferentes programas en función del tipo de pasas que se estén envasando y permite eliminar (por diferencia tanto de color como de estructura) todas las materias extrañas. Una vez envasadas y selladas las cajas, pasan por dos equipos detectores de metales adicionales.
“Gracias a la instalación de la nueva clasificadora hemos podido aumentar los rendimientos productivos y disminuir las mermas, ya que es muy precisa. Los IXUS, por su parte, son una herramienta muy útil para eliminar elementos de diferente densidad a la de las pasas y altamente eficaces con piedras de diversos tamaños”, confirma René Anjari, propietario y fundador de la empresa.
La Helius 1600 asegura una excelente calidad del producto final, sin decoloraciones no deseadas o materiales extraños. Sus válvulas eyectoras rechazan los defectos en milisegundos; su sistema de reducidas dimensiones apenas ocupa espacio; se puede acceder al control de calidad y comentarios a través de una pantalla táctil muy intuitiva; tiene un diseño modular y actualizable; brinda diferentes tipos de tecnologías láser adaptadas al uso que se necesite; se puede sincronizar entre bajas y tienen altas capacidades. Asimismo cuenta con un eficaz sistema de expulsión y su precisión es constante, garantizando un falso rechazo muy reducido; y es un equipo con una larga vida útil. Sin olvidar su alta capacidad, que alcanza las 8 o 10 toneladas por hora.
Para más información: www.tomra.com/es-es