La campaña de granada española terminará alrededor de un mes antes este año debido a que la producción descenderá en torno a un 30% en comparación la campaña pasada.
"Antes del inicio de la campaña de granada Mollar de Elche ya preveíamos una bajada de volúmenes de alrededor del 20%, pero después de las fuertes lluvias de finales de septiembre y sus consiguientes afectaciones en la fruta, la cosecha se ha reducido hasta un 30% aproximadamente", explica Susi Bonet, responsable de ventas en la cooperativa Cambayas, de Elche, la mayor productora de granadas en España.
"Algunos ya han terminado y nosotros lo haremos a finales de diciembre. No podremos aventurarnos a suministrar a nuevos clientes, ya que disponer de alrededor de 2 millones de kilos de granada menos se nota. Tendremos, no obstante, suficiente producción para completar los programas que ya teníamos con nuestros clientes", explica la comercial.
Si bien, de acuerdo con Susi Bonet, la falta de granada no se ha notado excesivamente en los mercados, se ha notado en las ventas de segundas categorías, que se han pagado muy bien este año. "Normalmente cuando hay abundancia de fruta de segunda, una parte termina yendo a parar a la industria de procesado. Este año apenas hay fruta para industria, la cual se paga más cara también. Esto nos hace pensar que este año el agricultor conseguirá precios dignos".
Aunque la demanda ha estado estancada debido a la abundante presencia de otros frutos exóticos como el kaki, las ventas son estables y están empezando a repuntar, así como los precios, debido a la limitada disponibilidad de producto. "De ahora hasta el final de campaña queda lo mejor por venir en lo que a ventas se refiere, coincidiendo con la época prenavideña. Las grandes cadenas de supermercado buscan siempre los productos exóticos por estas fechas y los precios suelen subir".
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