Las temperaturas aún no son muy bajas en el sur de Italia, pero hay que restaurar las estructuras de los invernaderos dañadas por el mal tiempo. Una vez que se han llevado a cabo las reparaciones de emergencia y los arcos han sido restaurados, ahora es el momento de colocar las cubiertas de plástico, pero según algunos productores, parece difícil encontrar las cubiertas adecuadas. FreshPlaza ha hablado con un joven productor de la región del Metapontino, Claudio Oliva.
"La época de la venta de coberturas ya ha terminado. Todos los pedidos ya han sido procesados. Las grandes empresas no producen películas termoplásticas todos los meses. Por lo tanto, conseguir un plástico con ciertas características técnicas es muy difícil en estos momentos. Para el cultivo de fresas, por ejemplo, es necesario tener en cuenta el grosor de la cubierta (0,13/0,15/0,20) y el tipo de cubierta: con luz difusa o luz directa y con efecto antigoteo. En mi opinión, esto último es muy importante. Conviene que el agua condensada de la humedad no caiga directamente sobre las plantas, sino que se drene lateralmente, evitando así las quemaduras solares en las hojas, la botritis, el moho gris u otros problemas fitopatológicos", explica el productor.
"Los fabricantes han enviado todo lo que tenían almacenado, pero probablemente no será suficiente. Tendremos que conformarnos con plásticos genéricos, para no tener las plántulas directamente bajo el cielo. Acabo de terminar de arreglar los invernaderos, intentando hacerlo lo mejor posible para recuperar los materiales. Ahora tendré que buscar un plástico adecuado, pero desde las primeras llamadas telefónicas a los distribuidores en la región he visto que el grosor que uso normalmente no está disponible. Afortunadamente, el tornado golpeó solo una de mis 4 hectáreas plantadas con fresas Sabrosa, generando pérdidas por un importe total de más de 20.000 euros".
Salvatore Pecchia, agrónomo de la organización de productores Asso Fruit Italia, comenta: "De nuestra primera encuesta bastante profunda, se puede concluir que el daño se ha producido en las estructuras de protección de los frutales de hueso y sobre todo de fresas, por un total de alrededor de 700.000 euros en lo que respecta a los miembros de la organización".
"De hecho, el 90% de los invernaderos dañados albergaban fresas. También han sido dañadas las placas solares y diversos equipos agrícolas. Asimismo hay problemas en algunas de las plantaciones de kiwis, donde el fuerte viento rompió las ramas, causando la pérdida de muchos frutos. El frío puede dañar las plantas y puede haber un retraso en la producción, pero todavía estamos a tiempo de actuar y llevar a cabo las reparaciones, dado que las temperaturas actuales están ligeramente por encima de la media estacional".