Esta semana comienzan las primeras expediciones de zanahorias de Salanque, de la empresa Fruit Union. Es el segundo año que la empresa ofrece a sus clientes zanahoria en invierno: "Ya habíamos probado el cultivo el año pasado con un centenar de toneladas de zanahorias comercializadas. Nuestros clientes apreciaron mucho esta zanahoria cultivada al aire libre, que les permitió unirla con la temporada de la zanahoria de primavera en abril (con otras zonas de producción). Dado el éxito que logró el producto, decidimos renovar este invierno la experiencia, esta vez con un objetivo de comercialización de alrededor de 600.000 manojos", explica Laurent Vichard, director de operaciones comerciales en Fruit Union.
"Con la zanahoria de Salanque, tenemos un producto extremadamente fresco"
La zanahoria de Salanque procede de una variedad de Nantes que se ha adaptado perfectamente a los territorios del sur: "Cuenta con un color intenso, es carnosa, dulce y muy buena a nivel gustativo. Se trata de una variedad reconocida que se da muy bien en esta tierra de Salanque, lo que nos permite garantizar a nuestros clientes una zanahoria de calidad y una gran frescura". De hecho, las zanahorias de Salanque se cosechan para venderse el mismo día, 6 días a la semana.
"Comercializamos frutas de hueso en verano y hortalizas en invierno"
Como estructura comercial delegada, Fruit Union comercializa frutas y hortalizas frescas procedentes de la agricultura ecológica y tradicional y de numerosas zonas de producción, sobre todo del valle del Ródano y de Languedoc-Rosellón. Nos adaptamos al contorno del arco mediterráneo, lo que nos permite dar a conocer gamas de productos producidos en terrenos diferentes. Nuestra sensibilidad a los factores meteorológicos es menor que la de nuestros compañeros establecidos a nivel regional.
Aunque Fruit Union cuente con una estructura de producto construida alrededor de la fruta de hueso, que representa hoy en día alrededor de la mitad de su cifra de negocios, también vende hortalizas de territorios franceses, como el valle del Ródano o el Rosellón, durante todo el año, procedentes principalmente de las cinco grandes familias: la batata, las lechugas, el apio, la zanahoria y la alcachofa en primavera. "Este enfoque estratégico nos permite ofrecer a nuestros clientes frutas y hortalizas durante todo el año. Además, la localización de nuestras diferentes zonas de producción situadas en el sur nos permite tener un calendario de producción muy distribuido en el tiempo. Como ejemplo, comenzamos las primeras cosechas de albaricoques en mayo y acabamos las últimas en septiembre".
"Nos centramos en lo local y contamos con el apoyo de productores que no temen emprender"
Fruit Union está muy apegada a sus orígenes, sus valores que favorecen lo local y el trabajo de sus productores. "Como empresa con sede en el sur, el cultivo de frutales forma parte de nuestro ADN, pero no queremos limitarnos a esta producción. Para nosotros, es muy importante innovar y ser los protagonistas de nuestros proyectos. No podemos pedirles a nuestros clientes que dejen de comprar productos originarios de España si no podemos ofrecerles productos franceses de calidad. Tenemos la oportunidad, por una parte, de vernos beneficiados con cierto reconocimiento técnico en el mercado y, por otra, de trabajar con muchos jóvenes productores que son dinámicos, sin miedo a emprender, a los que les encanta romper con lo establecido y que no temen lanzarse a nuevos cultivos, incluso si no son comunes en la región".
Fruit Union vende su producción en Francia a redes de minoristas, mayoristas y a la gran distribución. Aunque la empresa ofrece una amplia gama de productos ecológicos (brécol, col, pak choi, romanesco, espinaca, batata), también está comprometida con una tercera vía: "Ya contamos con la certificación ZRP [cero residuos de pesticidas] en nuestra producción de albaricoques y ahora trabajamos en el desarrollo de una gama ZRP para hortalizas".
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Laurent Vichard
Fruit Union
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