La empresa Boyer, especializada en la producción y exportación de frutas exóticas de la isla de Reunión, acaba de comenzar la campaña de piñas Victoria y de lichi enviadas en avión. Según Jean-Marc Boyer, director comercial de la empresa, esta campaña conlleva grandes desafíos logísticos. "En cuanto a producción, hay suficientes volúmenes, pero lo complicado va a ser su puesta en el mercado. Debido a la crisis sanitaria, habrá restricciones a los desplazamientos en los próximos meses. En consecuencia, la flota aérea estará más limitada que de costumbre. Va a ser complicado lograr que lleguen nuestros productos frescos por avión".
A nivel de calidad, parece que va a ser una temporada muy buena para todos los productos, aunque la piña y el lichi vienen con un leve retraso. "Para el lichi, esperamos todavía ligeras lluvias y sol para que aumente de tamaño. La piña Victoria también se hace esperar, ya que el invierno ha sido bastante largo y todavía hace frío en las zonas de producción".
Además de los productos de la isla de Reunión, Boyer comienza la temporada del mango de Perú de envío aéreo. "Para este producto, la temporada empieza en un buen momento", detalla Jean-Marc. Las frutas de Boyer se comercializan con la marca Philibon.
Jean-Marc añade que ya hay demanda de frutas exóticas. "Nuestros clientes comienzan a pedírnoslas. Es el periodo del año en el que no hay muchas más frutas en el mercado. A pesar de la COVID-19, hay demanda. Hay que seguir creyendo. Philibon va a hacer todo lo posible para estar al nivel esperado en esta campaña".
La familia Boyer
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Boyer
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