Actualmente, se pueden encontrar batatas de numerosos orígenes en el mercado francés. "Aunque hayamos decidido comercializar batatas españolas y egipcias, se pueden encontrar también originarias de los EE. UU., Francia, Honduras y Portugal", explica François Bellivier, director de desarrollo en Capexo. "Por esta razón, hay muchos volúmenes en el mercado, no solo por variedad de orígenes, sino también por la suma de todos estos. Desde un punto de vista general, la calidad de todos los orígenes es buena. No hay reservas con productos alterados o muy viejos".
El consumo de la batata, al igual que el de cierto número de frutas y verduras en la actualidad, se está viendo afectado por la segunda ola de COVID-19. "Se estima que del 25 al 30% de las batatas se destinan al sector de la restauración. El cierre de restaurantes genera un descenso de la demanda del producto. Sin embargo, esperamos que el consumo aumente durante las fiestas de fin de año".
Aunque la demanda de batatas no esté actualmente a su máximo nivel, el interés por el producto por parte del consumidor aumenta año tras año: "Es un producto que está muy de moda, hoy en día presente en todos los restaurantes modernos. Además, la batata cuenta con una excelente reputación gracias a sus cualidades, muy buenas para la salud".
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