Recientemente, algunos diputados holandeses hicieron preguntas en la Cámara de Representantes acerca del hecho de que Milieu Centraal, una entidad holandesa subvencionada que informa a la población sobre prácticas sostenibles, desaconsejara consumir tomates de invernadero cultivados en los Países Bajos en favor de los tomates importados de España o Marruecos.
Carola Schouten, ministra de Agricultura, Naturaleza y Calidad Alimentaria, respondió a las preguntas el viernes pasado. No negó los hechos, pero señaló que fueron el resultado de datos desactualizados. Mientras tanto, el informe portador del consejo ya no está publicado en la página web de Milieu Centraal, según señaló la ministra a la Cámara de Representantes. "El informe sobre frutas y verduras se retiró del sitio web en abril de 2020, ya que lleva mucho tiempo mantener actualizada la puntuación ambiental de todos los tipos de productos frescos mes tras mes", se puede leer en la web de la entidad.
Categorías
La organización sin ánimo de lucro Milieu Centraal hizo una clasificación de frutas y hortalizas en función de su impacto ambiental. A los productos se les asignó una categoría de la A a la E, siendo la A la que designa a los más respetuosos con el medio ambiente y la E a los más perjudiciales para el medio ambiente, dependiendo también de la temporada.
En invierno, Milieu Centraal les asignó a los tomates de cultivo local las categorías B, C, D y E. La ministra comentó que a la mayoría de los tipos de tomate le fue asignada la categoría B, pero a algunos tipos también la categoría E, lo cual sorprendió a mucha gente, especialmente porque los tomates de España y Marruecos obtuvieron las categorías A y B, siendo considerados menos perjudiciales para el medio ambiente.
Sin subvención
Schouten señaló que Milieu Centraal no había recibido ningún subsidio para elaborar el calendario de frutas y hortalizas y que no es el Gobierno quien debe determinar qué consejos dan las organizaciones independientes.
Los interrogadores, entre ellos los diputados Maurits von Martels, del partido político cristianodemócrata CDA, y Arne Weverling, del partido liberal VVD, preguntaron si la ministra consideraba el consejo como un menosprecio de la horticultura holandesa, que según los parlamentarios es pionera en el campo de la eficiencia, la innovación y control biológico. También se preguntaron si la recomendación de productos importados es conciliable con la política de economía circular fomentada por la ministra.
Sin recomendaciones por falta de datos actualizados
Schouten dijo que tenía mucho aprecio por la horticultura holandesa, ya que es líder en muchos aspectos. La ministra de Agricultura no se sintió tentada a elegir entre una u otra opción ella misma ni a dar consejos. "Por el momento no disponemos de ningún cálculo con el que se pueda hacer una declaración cuidadosa sobre cómo se relaciona la producción actual de tomates holandeses con la producción de tomates en otros países".
Invernadero vs. campo abierto e importación vs. producción local
Aunque el calendario objeto de la discusión ha sido retirado, Milieu Centraal enumera los diferentes puntos a partir de los cuales el consumidor puede elegir entre los diferentes productos. Por ejemplo, según Milieu Centraal, el cultivo en invernadero consume más energía que el cultivo en campo abierto, en parte debido a la calefacción, y por lo tanto, el cultivo genera más emisiones de CO₂ que el cultivo al aire libre. Por otro lado, también existen beneficios de sostenibilidad, incluido un consumo de agua mucho menor. "El cultivo en invernadero utiliza mucha menos agua que el cultivo en campo abierto", indica Milieu Centraal.
El organismo también señala, entre otras cosas, que es difícil determinar de qué tipo de invernadero proviene un producto. "El sector hortícola holandés de invernadero quiere tener un suministro de energía totalmente sostenible para 2050. Por eso el sector se está enfocando en la reducción de la energía, el calor geotérmico y la cogeneración de calor y energía (CHP), entre otras cosas. La cogeneración produce calor y energía de una manera más eficiente, por lo que se necesita menos gas natural. Gracias a la cogeneración y a la energía geotérmica en la horticultura de invernadero, las hortalizas cultivadas en tales invernaderos tienen una menor huella climática, pero en la tienda el consumidor no ve de qué tipo de invernadero proviene el producto fresco".