¡Suscríbase a nuestra newsletter y manténgase al día con las últimas noticias!

Suscribirse Ya soy suscriptor

Está usted usando un software que bloquea nuestros anuncios.

Ya que publicamos noticias gratuitamente, dependemos de los ingresos de nuestros banners. Por favor, le rogamos que desactive su bloqueador de anuncios y recargue la página para poder seguir visitando esta web.
¡Gracias!

Haga clic aquí para leer la guía de cómo desactivar su bloqueador de anuncios.

Sign up for our daily Newsletter and stay up to date with all the latest news!

Suscripción I am already a subscriber
Itamar Zisiling, de MetoMotion:

"Los equipos autónomos de los invernaderos se parecen a los ordeñadores automáticos"

"Hace 20 años, la industria láctea inició la transformación del ordeño automatizado; con las últimas mejoras en IA y robótica, el sector de los invernaderos se está uniendo a la revolución", afirma Itamar Zisiling, director de desarrollo de negocio de MetoMotion.

Itamar trabaja en MetoMotion, una empresa de tecnología agrícola que desarrolla equipos robóticos para el sector de los invernaderos. MetoMotion apareció recientemente en HortiDaily, pues su cosechadora robótica GRoW logró un 90% de éxito en la cosecha de tomates en el De Ruiter Experience Center.

Antes de trabajar con MetoMotion, Itamar adquirió una gran experiencia en robótica agrícola y pasó 20 años con Lely. Como explica Itamar, Lely es el líder mundial del mercado en el desarrollo de robots de ordeño (es decir, Lely Austronaut) y también ha desarrollado otros sistemas autónomos para la industria láctea. En 2020, Itamar se unió al equipo de MetoMotion y no puede dejar de observar las similitudes entre ambos sectores.

"El sector de los invernaderos está actualmente al borde de una revolución robótica; es probable que esa transición se produzca más rápidamente que en la industria láctea. Al principio, los productores de leche se mostraban escépticos y no creían que se pudiera sustituir a un humano. Luego pensaron que sí, pero no lo suficientemente rápido. Después les preocupaba que costara demasiado. Ahora, hay unos 70.000 robots de ordeño de Lely activos en todo el mundo que ordeñan 2,1 millones de vacas lecheras al día, y esta tendencia positiva no hace más que ganar impulso", explica Itamar.

Robot de ordeño de Lely

Al igual que en la industria láctea, Itamar señala que los productores se centran sobre todo en la rapidez con la que pueden trabajar los robots de invernadero, en el número de personas que pueden sustituir y en cómo afecta al cultivo.

"Un brazo robótico puede moverse más rápido que un brazo humano; sólo necesita tiempo para que la inteligencia artificial y los algoritmos se adapten y sean tan intuitivos como un trabajador humano. Una vez que aprende, esos problemas dejan de ser problemas", afirma Itamar.

La robótica en los invernaderos es necesaria para un crecimiento sostenido
Los equipos autónomos para invernaderos presentan la ventaja de reducir la necesidad de mano de obra dentro del invernadero, lo que podría ser especialmente beneficioso en zonas en las que mantener una mano de obra estable ha resultado difícil. La cosecha robotizada también combina la precisión de la cosecha con la recopilación de datos y el análisis, ayudando al productor a prever el rendimiento del cultivo y el tiempo de cosecha. Itamar también señala las ventajas de la robótica en los invernaderos respecto a la bioseguridad.

"Con la COVID, todos estamos comprendiendo lo difícil pero esencial que es controlar los virus. Lo mismo ocurre en los invernaderos, cuanta menos gente caminando por ellos, mejor", expresa el experto.

Robot cosechador GRoW2, Países Bajos, Agosto 2021

La genética es la clave del éxito del robot y de la eficacia de la cosecha
Según Itamar, la industria láctea tuvo inicialmente dificultades para equilibrar la genética con la implantación de la robótica, ya que no todas las vacas se adaptaban bien al sistema. Del mismo modo, la genética de las plantas será crucial para garantizar el éxito de los robots de invernadero. Sin embargo, aunque MetoMotion ha hecho que las empresas de semillas entren en la conversación, la falta de solicitud de variedades adaptadas a la robótica por parte de los productores ha hecho que eso no sea una prioridad para los obtentores de semillas.

"Tenemos un brazo robótico muy avanzado que puede agarrar el racimo y cortarlo. A medida que las cosechadoras robóticas se vayan implantando en los invernaderos, necesitaremos variedades resistentes que produzcan un alto rendimiento y que, al mismo tiempo, sean lo suficientemente abiertas y fuertes como para ser abordadas por un brazo mecánico. Eso ofrecería una mayor velocidad de cosecha", señala Itamar.

Otro punto es la disposición de los cultivos. Las prácticas e infraestructuras de trabajo en los invernaderos han evolucionado durante muchos años, para proporcionar un entorno de cultivo óptimo y una infraestructura de trabajo eficiente para las personas. Con el inicio de la era de los robots, los entornos de cultivo deberían tener unas condiciones óptimas para aprovechar al máximo lo que los robots pueden ofrecer.

La sugerencia de Itamar es que los productores se planteen ser los primeros en adoptar la robótica en los invernaderos, que lo comenten con sus asesores de cultivo y proveedores, y que se informen sobre las nuevas variedades aptas para la robótica, ayudando a que la revolución robótica en los invernaderos sea una realidad lo antes posible. En cuanto a MetoMotion, la empresa recibe a diario consultas sobre la fecha de lanzamiento de su cosechadora robótica GRoW, cuyo lanzamiento está previsto para principios de 2022.

 

Información de contacto:
Metomotion
+972-50-403-9286
info@metomotion.com  
www.metomotion.com/