Desde el lunes 22 de noviembre, las primeras cerezas chilenas están disponibles nuevamente en la empresa holandesa SFI Rotterdam. Aunque China ha absorbido gran parte de las cerezas de Chile en los últimos años, el importador –que estrena oficinas con vistas al río Mosa– siempre ha continuado ofreciendo cerezas chilenas durante el período previo a la Navidad. "Las espero con ansias todos los años. Y es que este producto simplemente irradia alegría y un ambiente de festividad", dice Jan Marc Schulz con entusiasmo.
"En los últimos años, China ha sido, por supuesto, la gran estrella para los productores de Chile, quienes, por otro lado, no se han olvidado de Europa en el período previo a la Navidad. No obstante, ya no recibimos los volúmenes a los que estábamos acostumbrados en el pasado", continúa Jan Marc. "Hace unos quince años todavía suministrábamos cerezas chilenas preenvasadas a los supermercados durante más tiempo, pero cuando se abrió el mercado chino para la cereza chilena, los programas se detuvieron. No obstante, seguimos ofreciéndolas todos los años antes de Navidad, aunque la llegada de los primeros volúmenes siempre depende de la situación del mercado".
"Las cerezas chilenas son muy interesantes en el período prenavideño, porque entonces se consiguen mejores precios. Aunque son caras, los consumidores chinos pagan aún más, por lo que espero que el consumidor europeo siga comprándolas", dice el importador. "El año pasado, en tiempos de coronavirus, la gente estaba dispuesta a comprar productos de lujo para consumo en casa, por lo que la demanda de cerezas chilenas fue buena. Creo que este escenario se puede repetir este año".
Según el importador, las cerezas se pueden importar perfectamente por transporte marítimo sin que el tránsito afecte a la calidad. "Pero debido a las disrupciones en el mercado de los contenedores –y por el momento nada indica que las compañías navieras se esfuercen para mejorar la situación–, es casi imposible tener llegadas antes de Navidad. No lo descarto, pero creo que llegarán tarde", dice Jan Marc.
No solo la situación logística, sino también el aumento en el coste de las materias primas y la falta de mano de obra para la cosecha son un problema. "Los productores chilenos no lo tienen fácil. La recolección de cerezas requiere mucha mano de obra, y siendo la cereza el primer producto que se cosecha en el país, preveo que la escasez de trabajadores será aún más grande en la cosecha de arándanos, ya que los productores de cerezas obviamente no dejarán ir a sus trabajadores".
A SFI Rotterdam no le interesa convertirse en un proveedor de cerezas durante todo el año. "Hay otros actores en el mercado que se dedican al suministro durante todo el año. Pero nos gusta ofrecer las cerezas chilenas, ya que sabemos que es un producto de calidad. Y si sigue habiendo demanda, siempre podemos suministrarlas hasta mucho después de Navidad. Si los precios son correctos, se pueden ofrecer hasta finales de febrero".
Para más información:
Jan Marc Schulz
SFI Rotterdam
Mercuriusweg 12B
3113 AR Schiedam (Países Bajos)
jmschulz@sfifruit.com
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