"Es un gran cambio". Así se expresa un expedidor de aguacates de México sobre la decisión tomada la semana pasada en la que el Departamento de Agricultura de México y las autoridades estadounidenses acordaron permitir la exportación de aguacates de un segundo estado mexicano a Estados Unidos. Durante casi 25 años, a México se le ha permitido exportar aguacates solo de un estado del oeste de México: Michoacán. El segundo estado al que ahora también se le permitirá enviar es el vecino Jalisco.
"La apertura de Jalisco a Estados Unidos podría quitarle otros dos mercados, que son Europa y Japón", dice Juan Escorcia, de Aguacates Aguirre, quien señala que el movimiento mundial del aguacate es una especie de danza en la que los diferentes países productores dependen de una red de mercados y esta decisión podría afectar a otros mercados. "No creo que nadie sepa todavía lo que va a pasar, pero se va a producir un ajuste comercial", señala. Añade que Japón, por ejemplo, depende bastante de México para los aguacates, pero más de Jalisco, y que la fruta de México enviada a Japón tarda 15 días en llegar por agua. "Ese es un buen periodo para que los aguacates viajen. Pero esta decisión para México es un gran paso. Como sector siempre hemos trabajado en esa dirección".
Esta decisión llega en un momento en el que la oferta de aguacate mexicano en general es más escasa. "Definitivamente, hay escasez de aguacates este año", continúa Escorcia. Los aguacates son un cultivo vecero, lo que significa que hay años de más abundancia de cosecha que compensan los años de poca producción. "Así es la cosecha actual desde mayo", dice. "Estamos al 70% en comparación con la cosecha del año pasado. Hay una diferencia del 30% entre la cosecha del año pasado y la de este año, así que creo que nos quedará un 10-15% de cosecha".
Escorcia señala que algunos productores están esperando a que acabe el año para cosechar la fruta, dado que el inventario norteamericano ya se ha contabilizado en gran medida para las semanas restantes de 2021. Esperan que el nuevo año traiga mejores precios.
Mientras tanto, la demanda es bastante estable para los aguacates y Escorcia señala que, una vez llegue enero, la demanda podría fortalecerse con los propósitos de una alimentación más saludable, así como la temporada del Super Bowl. También añade que, en general, el consumo de aguacates sigue creciendo anualmente.
Todo esto hace que los precios sean bastante fuertes en la actualidad. "Los precios son entre un 10 y un 15% más altos que el año pasado", concluye Escorcia.
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Juan Escorcia
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