La variedad protegida de clementina Sando, una mutación espontánea de la fina, que tiene su recolección entre la tercera semana de diciembre y febrero, avanza con la nueva organización Sando Clementine hacia una implantación firme en los territorios donde se originó: el sur de Castellón, Valencia y Andalucía, donde ha demostrado estar plenamente adaptada. Es “la clementina d’ací”, reza uno de sus slogans.
"Sando arranca su campaña con buenos precios al productor y con una excelente calidad de fruta. A pesar de la climatología adversa durante parte de este año, se esperan recolectar unos 15 millones de kilos, fundamentalmente en la provincia de Castellón, Valencia y Andalucía", cuenta Joan Antoni Caballol i Angelats, Director General de Sando Clementine.
"La mejora agronómica del cultivo se ha notado mucho en los calibres, algo que, junto con la resistencia innata que la protege de forma importante ante la climatología adversa y problemáticas como la alternaria, ha generado en los últimos dos años un gran interés por parte de los productores con certificación ecológica, así como también como sustitución de variedades muy afectadas por la alternaría", afirma. "Al color intenso y no tener pepitas, se le suma otra gran característica que es su alta productividad todos los años, ya que no es una variedad vecera, algo muy importante para que el agricultor rentabilice las explotaciones".
Sando Clementine SL, el obtentor desde finales de 2020, ha impulsado un camino de diálogo, de acuerdos con cooperativas y sindicatos del sector (como la Unió de Llauradors), tanto con conflictos heredados como para encontrar los mejores planes económicos para el productor profesional, con una especial sensibilidad hacia el colectivo de jóvenes agricultores, con créditos sin intereses ni avales.
A su vez, Sando se está abriendo a otros países productores de cítricos como Sudáfrica (finalizando la cuarentena), Australia (con la cuarentena comenzada) y planea introducirse también en Chile y Perú como proyecto para 2022, algo que contribuirá a poder disfrutar de esta variedad entre 6 y 7 meses al año.
Desde la campaña 2017-18 se comenzó con el etiquetaje de la variedad, con el sistema reconocido GESVATEC, que permite marcar la trazabilidad y autenticidad de la Sando. "No es un elemento baladí, ya que contribuye al conocimiento de la variedad y la certeza que es de un productor legal, algo que se traduce en un mejor precio para el exportador y para el productor. Aquí tenemos que lamentar que todavía muchos comercios no etiquetan debidamente la variedad y en algunos casos la venden bajo otras acepciones. Es imprescindible y obligatorio marcar correctamente las variedades, por ética de cara al consumidor final", señala Joan Caballol.
"También este último año se ha implantado con la ayuda tecnológica de Visualnacert, un sistema de geolocalización de las fincas licenciadas y a la vez de vigilancia por satélite que orienta a los inspectores de campo en la detección de fincas sin licencia que ocasionan un grave perjuicio a los productores legales", añade.
"Finalmente, fruto del trabajo de control, tenemos detectadas 41 fincas ilegales, con la certeza científica que son de la variedad Sando. Lo fácil y práctico sería interponer demandas penales para saber quiénes son los infractores....pero de momento haremos seguimiento de quién recolecta la fruta de esas fincas como corresponde. Antes apelábamos al dialogo, a la mano extendida. Ahora, vamos a mantener por un tiempo limitado la voluntariedad de regularizar estas fincas y otras no detectadas. Si los propietarios y productores vienen a legalizar la situación, sus explotaciones serán tratadas como nuevas, dando facilidades de pago. Este plazo se abre hasta el próximo 20 de enero de 2022. A partir de esa fecha optaremos por la vía judicial.
Para más información:
Joan Antoni Caballol i Angelats
Sando Clementine
Av. Generalitat, 104, 1ºC
43500-TORTOSA
Tel +34 609045598
[email protected]
www.sandoclementine.com