Las exportaciones de arándanos orgánicos chilenos alcanzaron entre los meses de enero a noviembre del año pasado un valor FOB de 147.893 millones de dólares, siendo el producto agroindustrial orgánico que más valor generó en ese periodo con un 57% del valor total exportado. En el caso de los arándanos frescos, originaron 99.668 millones de dólares FOB, el doble de valor que los congelados, con 48.244 millones de dólares FOB, de acuerdo con un informe de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa)
La mayor superficie de cultivo orgánico en Chile al 2020 correspondió a este berry, que con 5.756 hectáreas experimentaba un incremento del 49% respecto a las 3.868 hectáreas registradas en 2019. El auge de las plantaciones de arándanos se puede explicar con el término de la consulta que realizaron las regiones de Ñuble y Biobío al Departamento de Agricultura de Estados Unidos. El resultado fue la publicación en el registro federal estadounidense de un sistema de acercamiento para productores del berry en esas regiones.
Este sistema incorpora normas y medidas de control de riesgo de plagas que no incluye fumigar con bromuro de Metilo, compuesto que puede afectar la calidad del arándano y, por lo tanto, su precio en el mercado final. Al no usar este fumigante se evita perder competitividad con otros países productores que no tienen la necesidad de utilizarlos en sus territorios.
Los cultivos orgánicos en Chile están regulados por el Sistema Nacional de Certificación Orgánica que estipula una acreditación para los agricultores interesados en este mercado. Se puede obtener a través de una empresa calificadora o tras una auto certificación por medio de una de las 22 Organizaciones de Agrícolas Ecológicos (OAE), todo bajo la supervisión del Servicio Agrícola y Ganadero.
Alza en la demanda por sostenibilidad
En 2020, Chile exportó productos agrícolas orgánicos por un valor de 311 millones de dólares (FOB) a más de 50 países. El comercio internacional es facilitado por los convenios de certificación orgánica existentes.
Chile mantiene un acuerdo de equivalencia con la Unión Europea y Suiza, además de uno de entendimiento con Brasil; asimismo, actualmente está en proceso un acuerdo con Estados Unidos y se mantienen conversaciones con Japón y Australia.
Sin embargo, la Odepa desafía a expandir la industria orgánica conquistando el mercado interno. En Chile se importaron productos orgánicos por un valor de 9.086 millones de dólares en 2020; una oportunidad para los interesados en obtener mayor valor por sus productos generando una menor huella medioambiental.
Fuente: blueberriesconsulting.com